Niveles de Apoproteínas B, A1 y CIII como marcadores de riesgo cardiovascular en adolescentes delgados y obesos.
Resumen
Las enfermedades cardiovasculares constituyen un problema de salud pública de la población adulta. Debido a que las alteraciones ateroscleróticas tienen su origen en la niñez, se hace nece sario identificar marcadores bioquímicos en etapas tempranas de la vida, como en la adolescencia. Se estudiaron 79 adolescentes (48 hembras y 31 varones) en edades comprendidas entre 13 y 17 años. A cada adolescente se le realizó una historia clínica. Se evaluó el estado pu beral de acuerdo a los criterios de Tanner. Además se realizó la evaluación antropométrica a tra vés de peso, talla, índice de masa corporal (IMC) y medición de cintura, cadera y los pliegues subcutáneos. Se calcularon los índices decentralidad (PSE/PT) y de obesidad (PSE + PB + PT). Después de un ayuno de 12 horas, se determinaron en suero los niveles basales de glicemia, co lesterol total (CT), triglicéridos (TG), colesterol de las lipoproteínas de baja densidad (LDL-C) y alta densidad (HDL-C) por métodos enzimáticos y los niveles de insulina basal por radioinmu noensayo (RIA). Se determinaron las concentraciones de apoproteínas A1, B y CIII por inmunoturbimetría. De acuerdo a su IMC y tomando como punto de corte 25 kg/m2 se observó que el 35% de las hembras y el 16% de los varones eran obesos. Al mismo tiempo, el 85% de las hembras y el 58% de los varones presentaron hiperinsulinemia (insulina basal >12μU/mL). Las medidas de circunferencia, pliegues e índices de centralidad y obesidad fueron su periores (p<0,05) en los varones comparados con las hembras. La media general de insulina tanto para hembras como para varones resultó más alta de acuerdo al punto de corte establecido para insulina en nuestro la boratorio, pero fue significativamente superior (p<0,05) en las hembras. Esto se acompañó de niveles más altos de CT en las hembras y niveles más bajos de HDL-C en los varones. La apo A1 se encontró asociada en forma negativa con el índice de obesidad y positivamente con la HDL-C. La apo B se relacionó con los niveles de CT y LDL-C, mientras que la apo CIII se aso ció positivamente con las concentraciones basales de insulina, TG y VLDL-C. Estos resultados sugieren que la apo CIII pareciera ser un buen marcador de niveles elevados de insulina, insuli no resistencia y de riesgo cardiovascular precoz.