Rescribir (hoy) políticamente la filosofía.
Resumen
En el actual contexto de la supercapitalización mundial la filosofía no puede ya presenciar una segunda muerte de ella misma. Las consecuencias de la contradictoria mundialización hacen que la filosofía haya de ir a una cita futura con el pensamiento. El capitalismo está haciendo una historia universal y se legitima en un discurso globalizador y uniformante de conciencias. ¿Por qué seguimos temiendo el juicio teórico a la “razón total humana” y esquivando los criterios universales de verdad? La filosofía debe salir de la crisis del modelo universalista de pensamiento, pues la expansión y el desgaste de la mundialización le está haciendo progresar hacia una forma futura de pensar. Filosofar sin el martillo. Se necesita pensar “después” y “más allá” de la crítica exegética que acompañó a la filosofía. Sin renunciar a la función crítica, hemos de situarnos en la comprensión de los gestos ético-políticos del pensamiento.