Resultados preliminares sobre el uso de Lisozima inyectada (LIZOVET) para mejorar la respuesta al protocolo de sincronización para inseminación en novillas bufalinas
Resumen
La lisozima es una enzima natural presente en muchos fluidos corporales de animales y humanos, donde cumple funciones inmunoestimulantes, bactericidas, virucidas y antiinflamatorias. Un producto comercial a base de Lisozima (LIZOVET, Laboratorio Agriquimvet, Estado Aragua, Venezuela) para uso en diferentes especies animales ha aumentado efectivamente la producción y la salud en vacunos, aves y cerdos. Sin embargo, el efecto de la lisozima sobre la reproducción del búfalo es poco conocido. El objetivo de este trabajo fue determinar el efecto de la lisozima inyectable (Lizovet) sobre la respuesta al protocolo de sincronización para inseminación en novillas bufalinas. Realizamos pequeñas pruebas de campo en granjas de búfalos en el estado Barinas, Venezuela. Se preparó un grupo de 20 bubillas 21 días antes para aplicar un protocolo de sincronización para la inseminación al inicio de la temporada reproductiva con mezcla mineral completa. Además, un grupo de tratamiento (n=10) recibió tratamiento con Lisozima inyectable a una dosis de 1 cc/60 Kg de peso intramuscular semanalmente durante tres semanas. Las otras bubillas no fueron tratadas y quedaron como grupo control (n=10). Los resultados preliminares de este estudio mostraron que, en el caso de las bubillas, el 100% del grupo tratado con LIZOVET fueron clasificadas como aptas para el ingreso al programa de inseminación al presentar folículos ováricos con un tamaño promedio mayor a 11 mm y la presencia de cuerpo lúteo, en comparación con el grupo control donde sólo el 30% de ellas clasificaron para inseminación al presentar un tamaño promedio de folículos ováricos de 7,5 mm. En conclusión, la lisozima (LIZOVET) mejoró efectivamente la respuesta al protocolo de sincronización para la inseminación en bubillas bufalinas. Las expectativas del futuro probablemente sean favorecer el crecimiento folicular a nivel ovárico. Lo último merece más estudios.