Asociación de electroanalgesia (tens) y ultrasonoterapia en el tratamiento de lesiones inflamatorias del m. longissimus dorsi en el equino
Resumen
La importancia que adquirió la fisioterapia en los últimos decenios en Medicina Veterinaria y el aumento constante de sus posibilidades dieron lugar a que se use con frecuencia como complemento de la terapéutica medicamentosa o en muchos casos la reemplace. En este trabajo los autores exponen su experiencia en el empleo de la electroanalgesia y el ultrasonido asociados como tratamiento único en las miositis del M. Longissimus dorsi, tan común en caballos de salto. La electroanalgesia, también denominada TENS (transcutaneus nerve stimulator), permite producir analgesia o al menos hipoalgesia de una zona crónicamente dolorosa mediante la estimulación de receptores sensitivos inervados por fibras gruesas provocando un bloqueo de los impulsos dolorosos que llegan a las astas dorsales de la médula conducidos por fibras nerviosas amielinicas. [5,12,18]. El ultrasonido, (aquellas ondas que superan el umbral auditivo humano -20000 hz-), se utiliza por su importante efecto térmico, que aumenta la circulación sanguínea provocando un mayor aflujo de sustancias nutritivas y una mejor evacuación de catabolitos con la consiguiente desinflamación, y por su efecto mecánico, dado que produce movimientos oscilatorios que aumentan la permeabilidad de las membranas celulares, se liberan las adherencias fibróticas por separación de las fibras colágenas y reblandecimiento del cemento intercelular. Es así que aprovechando el efecto inhibidor del TENS y la acción resolutiva del ultrasonido, los autores han asociado ambos métodos para el tratamiento de las miositis traumáticas del M. Longissimus dorsi, tan frecuentes en el equino de salto deportivo. Se trabajó sobre una población de 63 equinos de salto de la Ciudad de Buenos Aires de la República Argentina con diagnóstico clínico y ecográfico de miositis grado II del músculo mencionado. Los equinos se dividieron en tres grupos aleatoriamente. Al grupo 1 se le aplicó una asociación de Ultrasonoterapia con TENS. Al grupo 2 sólo se le aplicó Ultrasonoterapia y al grupo 3 sólo TENS. Las dosis en todos los casos fueron Ultrasonoterapia 3,5 w/cm2 pulsante, 20 minutos, una vez al día y Electroanalgesia (TENS): técnica bipolar, 50 ciclos por segundo, intensidad 2 mA durante una hora, 3 veces por día durante 30 días. Los animales se evaluaron clínica y ecográficamente en forma semanal. El grupo I remitió totalmente los signos el día 14, el grupo 2 sólo manifestó mejoría a partir del día 28, mientras que el grupo 3 mantenía el dolor a los 30 días.