Revista de Ciencias Sociales (RCS)
Vol. XXIX, No. Especial 8,
julio-diciembre 2023. pp. 119-135
FCES
- LUZ ● ISSN: 1315-9518 ● ISSN-E: 2477-9431
Como citar: Tarazona, A. K., Loor, L. D. R.,
Pedroso, T., y Palomeque, J. Y. (2023). Resiliencia con enfoque humanista en
pacientes con consumo problemático de sustancias. Revista De Ciencias
Sociales, XXIX(Número Especial 8), 119-135.
Resiliencia
con enfoque humanista en pacientes con consumo problemático de sustancias
Tarazona Meza, Anicia
Katherine*
Loor Salmon, Liliana
del Rocío**
Pedroso Roller, Taimy***
Palomeque Zambrano,
Jeniffer Yadira****
Resumen
La estrategia para
mejorar la calidad de vida de aquellos en recuperación de adicciones propone un
enfoque holístico y multidisciplinario, que considera los aspectos físicos,
emocionales, sociales y psicológicos. Al respecto, este artículo presenta los
resultados de un estudio que tiene como objetivo evaluar la resiliencia
utilizando un enfoque humanista, en pacientes con consumo problemático de
sustancias en el Centro de Rehabilitación Nueva Esperanza del Cantón Bolívar,
Ecuador. Se utilizó un diseño no experimental longitudinal, donde se
recolectaron datos por medio de pruebas psicométricas como el Test SV-RES, así
como cuestionarios aplicados a los pacientes. Los resultados obtenidos
revelaron niveles medios de resiliencia, con capacidad de adaptarse a
situaciones adversas, a pesar de su lucha contra la adicción, estos individuos
poseen la resiliencia necesaria para su recuperación, lo que puede ser reforzada
mediante intervención adecuada. Las conclusiones subrayan la imperiosa
necesidad de intervenciones preventivas y terapéuticas dirigidas a fortalecer
la resistencia a influencias sociales negativas, incrementar la resiliencia
personal, y tener en cuenta diferencias de género específico en el tratamiento.
Palabras clave: Resiliencia; consumo
problemático de sustancias; enfoque humanista; centro de rehabilitación;
factores de riesgo.
Resilience with a humanistic approach in patients with
problematic substance use
Abstract
The strategy to improve
the quality of life of those recovering from addictions proposes a holistic and
multidisciplinary approach, which considers the physical, emotional, social and
psychological aspects. In this regard, this article presents the results of a
study that aims to assess resilience using a humanistic approach, in patients
with problematic substance use at the Nueva Esperanza Rehabilitation Center in
Cantón Bolívar, Ecuador. A longitudinal non-experimental design was used, where
data was collected through psychometric tests such as the SV-RES Test, as well
as questionnaires applied to the patients. The results obtained revealed
average levels of resilience, with the ability to adapt to adverse situations,
despite their fight against addiction, these individuals have the necessary
resilience for their recovery, which can be reinforced through appropriate
intervention. The conclusions underscore the urgent need for preventive and
therapeutic interventions aimed at strengthening resistance to negative social
influences, increasing personal resilience, and taking into account specific
gender differences in treatment.
Keywords: Resilience; problematic
substance use; humanistic approach; rehabilitation center; risk factors.
Introducción
La adicción a las
drogas se ha convertido en una crisis sanitaria global, erosionando la calidad
de vida y vinculándose de manera intrínseca con la exclusión social, la
fragilidad institucional, la inseguridad y la violencia (Laudet, Morgen y White, 2006). Este fenómeno amenaza la gobernabilidad,
obstruye el desarrollo socioeconómico y su alcance es verdaderamente global. En
un Informe Mundial sobre las Drogas, se señala que el 5,6% de la población
mundial, entre 15 y 64 años, ha consumido drogas al menos una vez, con
trastornos resultantes de dicha adicción (Peacock et
al., 2018; Nawi et al., 2021).
La Organización Mundial
de la Salud (OMS) en 1965 definió a la adicción como una condición física y
psicoemocional que genera dependencia hacia una sustancia, actividad o
relación, subrayando la relevancia de los factores biológicos, genéticos,
psicológicos y sociales en su desarrollo y persistencia (Nizama-Valladolid, 2016).
Ecuador también
confronta este problema de salud pública, y la prevalencia del consumo de
drogas en la población estudiantil es significativa (López-Guerra
et al., 2022). A pesar de la implementación de un enfoque integral para
el tratamiento e integración social de personas con consumo problemático de
sustancias, a través de entidades como los Centros Especializados en el
Tratamiento a Personas con Consumo Problemático de Alcohol y otras Drogas
(CETAD) y variadas instituciones privadas, el reto de abordar la dependencia a
las drogas persiste como un desafío notable en el contexto ecuatoriano.
Este escenario resalta
la necesidad de enfoques innovadores y efectivos para combatir la adicción. Al
respecto, Kossek
y Perrigino (2016); Pérez et al. (2020); así como
Vargas y García (2021), subrayan la relevancia de la
resiliencia, un constructo que hace referencia a la capacidad de adaptarse
positivamente a situaciones adversas, como en el tratamiento de las adicciones.
Sin embargo, se observa un vacío en la literatura científica en cuanto a cómo
integrar de manera efectiva la resiliencia en la rehabilitación de individuos
con consumo problemático de drogas.
La presente
investigación busca abordar este vacío en la literatura, dando protagonismo a
la resiliencia en el proceso de rehabilitación, considerando una muestra de 19
pacientes con consumo problemático de sustancias del Centro de Rehabilitación
Nueva Esperanza del cantón Bolívar en Ecuador, a los cuales se les aplicó el Test SV-RES para evaluar sus niveles de
resiliencia. Luego, se implementó una intervención centrada en la resiliencia
con un enfoque humanista, con el objetivo de fortalecer los factores
resilientes y evaluando el desarrollo de comportamientos de este tipo
post-intervención.
El valor de este
estudio radica en su contribución a la terapia de adicciones, puesto que los modelos
de intervención basados en la resiliencia han demostrado ser prometedores (Brownlee et al., 2013). Además, este estudio busca
ampliar las investigaciones previas realizadas en la provincia de Manabí-Ecuador,
centradas en la identificación de problemas de comportamiento y estrategias
resilientes en pacientes en rehabilitación (Hoseiny
et al., 2015).
En este contexto, el objetivo
general de la presente investigación es evaluar la resiliencia utilizando un
enfoque humanista, en pacientes con consumo problemático de sustancias en el
Centro de Rehabilitación Nueva Esperanza del Cantón Bolívar, Ecuador. Este
estudio es una contribución valiosa a los esfuerzos de la Red Ecuatoriana de
Investigación en Resiliencia y a la lucha global contra la adicción a las drogas.
Finalmente, la
estrategia para mejorar la calidad de vida de aquellos en recuperación de
adicciones propone un enfoque holístico y multidisciplinario, que considera los
aspectos físicos, emocionales, sociales y psicológicos. Además, fomenta un estilo
de vida saludable, donde se desarrollan habilidades de afrontamiento y se
promueve la autocompasión; se fortalecen las redes de apoyo social, se fomentan
las relaciones saludables y la conexión con la comunidad. Asimismo, psicológicamente,
se trabaja en la resiliencia y la superación de traumas, ansiedad y depresión,
para lo cual, este plan, basado en evidencia y buenas prácticas, es adaptable,
así como personalizable. La recuperación es un proceso que requiere tiempo,
paciencia y compromiso, y aunque no es fácil, con el apoyo adecuado es posible.
1.
Metodología
Este estudio de diseño
no experimental longitudinal permitió examinar los niveles de resiliencia de un
grupo de pacientes con trastorno por consumo de sustancias en un centro de
rehabilitación a lo largo del tiempo, utilizando un enfoque cuantitativo. Mediante
la aplicación de pruebas psicométricas y cuestionarios, se obtuvieron datos que
proporcionaron información valiosa sobre la resiliencia y los factores
asociados al consumo de sustancias.
Se empleó la prueba
psicométrica SV-RES para cuantificar los niveles de resiliencia en una población
de estudio constituida por 22 pacientes masculinos, con edades comprendidas
entre 15 y 60 años, del Centro de Rehabilitación Nueva Esperanza. De este
conjunto, se seleccionó una muestra de conveniencia de 19 pacientes, todos
satisfaciendo los criterios específicos de inclusión y exclusión. Además, se
obtuvieron datos sobre consumo de sustancias utilizando un cuestionario
compuesto por nueve elementos de respuesta cerrados. La evaluación de la
resiliencia se realizó a través del instrumento mencionado, el cual fue
diseñado por Saavedra y Villalta (2008b).
El estudio se llevó a
cabo en tres fases: Recolección inicial de datos, análisis y ajuste de la
propuesta de intervención de resiliencia e implementación de dicha intervención
en la muestra seleccionada. Después de la intervención, se realizó una segunda
evaluación para identificar cualquier cambio en los niveles de resiliencia. Para
el análisis de datos se utilizó estadística descriptiva, la cual permitió
esbozar las características de la muestra, y se aplicó una prueba de
comparación de medios para identificar diferencias significativas en los
niveles de resiliencia antes y después de la intervención, con un nivel de
significación del 5%. El análisis y procesamiento de los datos se realizó con
el software estadístico SPSS. Los
hallazgos se integraron en un informe final que fue sometido a revisión y
evaluación por expertos en el campo.
En relación a las
características demográficas de los participantes, se observó en la Tabla 1 que
el 100% de los pacientes son de sexo masculino, con edades comprendidas entre
15 y 60 años. En cuanto al nivel de escolaridad, se encontró que la mayoría de
los participantes tienen estudios de bachillerato (85%), también estudios
primarios (5%), y universitarios (5%). En cuanto al estado civil, la mayoría de
los pacientes son solteros (79%); mientras que un porcentaje menor está casado
(21%).
Tabla 1
Características
demográficas de los pacientes en el estudio
Características |
Número de pacientes |
Porcentaje |
Edad (años) |
15-60 |
100% |
Sexo |
Masculino |
100% |
Nivel de escolaridad |
||
Primaria |
1 |
5% |
Secundaria |
1 |
5% |
Bachiller |
16 |
85% |
Universitario |
1 |
5% |
Estado civil |
||
Casado |
4 |
21% |
Soltero |
15 |
79% |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
Estos datos
proporcionan una visión general de la muestra utilizada en el estudio y ayudan
a contextualizar los resultados presentados. Es importante destacar que esta
información es fundamental para comprender la aplicabilidad de los hallazgos y
su posible extrapolación a otras poblaciones.
2.
Resultados y discusión
En el presente estudio
se recopilaron datos de un grupo de pacientes con consumo problemático de
sustancias del Centro de Rehabilitación Nueva Esperanza del cantón Bolívar,
Ecuador. El Gráfico I, proporciona información adicional sobre las sustancias
más consumidas por los pacientes del estudio. De acuerdo con los resultados
obtenidos, se observa que un porcentaje significativo de los pacientes (47%)
inició el consumo de sustancias entre los 13 y 15 años de edad. Estos hallazgos
resaltan la importancia de la etapa de la adolescencia como un periodo crítico
en el cual los individuos son más susceptibles a experimentar y comenzar el
consumo de drogas, ya sean estas lícitas o ilícitas (Degenhardt et al., 2016; Jackson y
Goossens, 2020).
Fuente:
Elaboración propia, 2023.
Gráfico I: Inicio del consumo y sustancias
más consumidas
Según los resultados,
la marihuana fue la sustancia más consumida, con un porcentaje del 63%. La
cocaína, también fue mencionada por un número significativo de pacientes,
representando el 21% de los casos. Además, se observó un consumo considerable
de bebidas alcohólicas, con un 16% de los pacientes reportándolo como una de
las sustancias consumidas. Es importante destacar, que el 68% de los pacientes
manifestaron haber consumido más de una sustancia, lo cual refuerza la
complejidad y gravedad del problema de consumo problemático de sustancias en
esta población.
Estos resultados
corroboran la relevancia de abordar de manera temprana y efectiva la prevención
del consumo de drogas en la adolescencia, así como la necesidad de implementar
estrategias de intervención y tratamiento adecuadas para aquellos que ya han
iniciado un consumo problemático. Además, subrayan la importancia de continuar
promoviendo investigaciones en el campo de las adicciones, con el objetivo de
mejorar la comprensión de los factores de riesgo y protección, asociados al
consumo de sustancias en diferentes etapas del desarrollo.
El Gráfico II, muestra
los resultados obtenidos sobre los lugares de consumo más frecuentes y los
motivos que impulsaron a los individuos a iniciar el consumo de sustancias.
Estos resultados son de gran relevancia para comprender los factores ambientales
y psicosociales que están relacionados con el inicio del consumo problemático
de drogas.
Fuente:
Elaboración propia, 2023.
Gráfico II:
Lugares de consumo y motivos del inicio de consumo
El Gráfico II, muestra
que el 47% de los pacientes iniciaron el consumo de sustancias debido a la
influencia de amigos, un 42% por curiosidad y el 11% por influencia familiar.
Esto refuerza el papel de factores sociales en el inicio del consumo (Pilatti, Read
y Pautassi, 2017;
Poudel y Gautam, 2017). En cuanto a los lugares de
consumo, el 68% prefería el barrio; mientras que un 16% optaba por lugares
apartados. Es notable que el 11% y 5% consumían en el trabajo y hogar,
respectivamente, mostrando la influencia del ambiente en el acceso a sustancias
(Kinyanjui y
Atwoli, 2013; Askew, 2016).
Estos datos subrayan la
necesidad de considerar factores sociales y ambientales en la prevención y
tratamiento de adicciones. Es crucial desarrollar estrategias preventivas que
promuevan resistencia y decisiones saludables, y diseñar intervenciones que
limiten el acceso a sustancias en lugares propensos al consumo (Kabisa et al., 2021; Owens, Smalling
y Fitzpatrick, 2021).
El Gráfico III,
presenta los resultados relacionados con el tiempo de ingreso de los pacientes
al Centro de Rehabilitación Nueva Esperanza y el tipo de ingreso que
experimentaron. Estos datos son fundamentales para comprender los patrones y
las circunstancias en las que las personas buscan ayuda y acceden a los
servicios de rehabilitación, así como la duración de la estancia de los
individuos en el centro y su disposición a recibir tratamiento.
Fuente:
Elaboración propia, 2023.
Gráfico III:
Tiempo de ingreso y tipo de ingreso
En primer lugar, se
observa que solo el 16% de los pacientes ingresaron de forma voluntaria al
centro. Esto sugiere que la mayoría de los individuos no tomaron la iniciativa
de buscar ayuda por sí mismos, sino que fueron motivados o impulsados por otros
factores, como derivaciones médicas o intervención familiar. Este hallazgo es
consistente con la literatura previa que señala que muchas personas con consumo
problemático de sustancias, pueden experimentar barreras para reconocer su
problema y buscar ayuda de manera autónoma (Rogers et
al., 2019).
En cuanto a la duración
del tratamiento, se observa que el 69% de los pacientes tenía una estancia de
uno a tres meses en la clínica. Esto indica que la mayoría de los individuos
recibieron tratamiento durante un período relativamente corto. Por otra parte,
el 33% de los pacientes tuvo una duración de tratamiento de cuatro o más de
cinco meses. Estos resultados sugieren que un subgrupo significativo de
pacientes requirió una estancia más prolongada en el centro para abordar su
consumo problemático de sustancias de manera efectiva.
Es importante destacar
que la duración óptima del tratamiento para el consumo problemático de
sustancias puede variar según las necesidades individuales y la gravedad de la
adicción. Sin embargo, estudios previos han demostrado que los programas de
tratamiento de mayor duración tienden a estar asociados con mejores resultados
a largo plazo, como tasas de abstinencia más altas y reducción de recaídas (Bradizza, Stasiewicz y Paas, 2006; Luigjes et al., 2019). Por
lo tanto, es necesario considerar la importancia de evaluar continuamente la
respuesta al tratamiento de cada paciente y ajustar la duración y la intensidad
del mismo según sea necesario.
Los resultados
presentados en el Gráfico IV, proporcionan información relevante sobre los
tratamientos recibidos por los pacientes y los motivos de recaídas en el Centro
de Rehabilitación Nueva Esperanza. Estos datos son fundamentales para
comprender la eficacia de los tratamientos implementados y los desafíos que
enfrentan los pacientes en su proceso de recuperación.
Fuente:
Elaboración propia, 2023.
Gráfico IV:
Tratamientos y motivos de recaídas
El Gráfico IV, indica
que el 53% de los pacientes iniciaba su primer tratamiento formal para la
adicción; mientras que el 32% ya había tenido entre uno y dos ingresos previos al
centro. Un preocupante 15% había tenido entre cuatro y más de seis tratamientos
anteriores, evidenciando múltiples recaídas. Respecto a las causas de recaída,
el 37% se atribuyó a desafíos familiares, el 21% a problemas emocionales y
deseos de evasión, y el 11% a influencias de amistades negativas.
Estos hallazgos
resaltan la relevancia de los factores familiares y emocionales en el
tratamiento de adicciones, consistentemente con estudios anteriores (Moos y Moos, 2007; Carbia et al.,
2021). La persistencia de problemas familiares y
emocionales puede incrementar la propensión a recaídas. Por tanto, es esencial
que las intervenciones terapéuticas incorporen estrategias como terapia
familiar y emocional para robustecer las habilidades de afrontamiento y fomentar
un contexto de apoyo en la rehabilitación.
A continuación, se
presentan los resultados obtenidos en la Tabla 2, la cual muestra los
resultados del test SV-RES en su primera aplicación. Este instrumento
psicométrico fue utilizado para evaluar los niveles de resiliencia de los
pacientes antes de la intervención en resiliencia.
Tabla
2
Resultados del test SV-RES 1ra aplicación
Nivel de resiliencia |
Números de pacientes |
Porcentaje |
Alto |
7 |
37% |
Medio |
10 |
53% |
Bajo |
2 |
10% |
Total |
19 |
100% |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
Tras la implementación
inicial del test SV-RES, el 53% de
los participantes manifestó un nivel medio de resiliencia, denotando
habilidades y recursos para afrontar adversidades. Estos datos concuerdan con
investigaciones anteriores en individuos con adicciones en fases tempranas de
rehabilitación (Finch et al., 2018; Cos et al., 2020),
y en aquellos con historial de recaídas (Deutsch-Link
et al., 2020); estos estudios señalan una resiliencia media, sugiriendo
una determinación para superar sus adicciones. No obstante, tales hallazgos
contrarrestan con los argumentos de Witkiewitz et al.
(2014), quienes indicaban una propensión de
estos individuos a recaer en patrones adictivos, a pesar de las repercusiones
socioambientales.
Estos resultados subrayan
la relevancia de incorporar la resiliencia al idear intervenciones terapéuticas
para individuos con consumo problemático. Detectar fortalezas y
vulnerabilidades resilientes puede optimizar estrategias terapéuticas,
promoviendo una rehabilitación más eficaz. Es crucial considerar que estos
datos provienen de la evaluación preliminar. Tras la intervención, se
reevaluará la resiliencia, permitiendo discernir la influencia terapéutica en
su fortificación.
A continuación, se
presentan los resultados de la Tabla 3, que muestra los hallazgos obtenidos en
la primera aplicación del test SV-RES
en el componente “Yo soy - Yo estoy”. En este componente del test, se evalúan aspectos relacionados
con la percepción de la identidad y el sentido de pertenencia de los participantes.
Tabla
3
Componente Yo soy- Yo estoy (1ra aplicación)
Nivel |
F.1 Identidad |
F.2 Autonomía |
F.3 Satisfacción |
F.4 Pragmatismo |
Alto |
63% |
53% |
14% |
31% |
Medio |
31% |
34% |
58% |
38% |
Bajo |
6% |
13% |
28% |
31% |
Total |
100% |
100% |
100% |
100% |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
En la Tabla 3,
referente al componente “Yo soy - Yo estoy”, se destaca el factor identidad,
con un 63% de los individuos exhibiendo un firme reconocimiento de sus
características intrínsecas, subrayando una robusta identidad. En autonomía,
relacionado con la capacidad individual de definirse y contribuir al contexto
sociocultural, los datos sugieren que los sujetos mantienen un adecuado grado
de independencia para afrontar desafíos. No obstante, el factor satisfacción
presentó una disminución, sugiriendo posibles dificultades en la percepción de
sus problemáticas, lo que podría influir en su contentamiento vital. Esta
observación enfatiza la necesidad de que las intervenciones terapéuticas
refuercen este aspecto, buscando potenciar la resiliencia y el bienestar.
Estos hallazgos
provienen de la evaluación preliminar, previa a cualquier intervención. A
medida que avance el tratamiento, se anticipa un fortalecimiento en estos
componentes resilientes. Cabe resaltar, que la consolidación de estos factores
podría demandar intervenciones extendidas y consistentes para alcanzar cambios
significativos.
A continuación, se
presenta la Tabla 4, la cual muestra los resultados del componente “Yo tengo”
en la primera aplicación del test
SV-RES, encontrando que el 42% de los pacientes manifestó un nivel alto en el
factor de metas, subrayando una orientación definida hacia objetivos vitales.
Este dato concuerda con estudios previos que resaltan la relevancia de metas
claras en el proceso resiliente (Tsourtos et al.,
2019).
Tabla
4
Componente Yo tengo (1ra aplicación)
Nivel |
F.5 Vínculos |
F.6 Redes |
F.7 Modelos |
F.8 Metas |
Alto |
26% |
37% |
31% |
42% |
Medio |
68% |
47% |
53% |
42% |
Bajo |
2% |
16% |
16% |
16% |
Total |
100% |
100% |
100% |
100% |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
En el aspecto de
vínculos, que alude a las conexiones afectivas con el entorno cercano, el 68%
de los participantes registró un nivel medio. Esta cifra insinúa que, aunque
existen lazos de apoyo en su entorno, aún hay margen para potenciar estas
conexiones y así robustecer su resiliencia.
Sobre los modelos,
relacionados con la percepción del apoyo de redes cercanas en superación de
adversidades, el 53% indicó un nivel medio. Esto denota que, aunque reconocen
la valía de este soporte social, se identifica un espacio para reforzar esta percepción
y maximizar el apoyo de sus redes. Cabe mencionar, que estos hallazgos reflejan
una evaluación previa a cualquier intervención terapéutica. Se anticipa que,
con la intervención pertinente, estos componentes resilientes podrán ser
fortalecidos en el proceso rehabilitador de los pacientes.
A continuación, se
presentan los resultados de la Tabla 5, correspondiente al componente “Yo
Puedo” en su primera aplicación del test
SV-RES. Este componente se refiere a la percepción de las habilidades y recursos
personales para enfrentar y superar las dificultades.
Tabla
5
Componente Yo puedo (1ra aplicación)
Nivel |
F.9 Afectividad |
F.10 Autoeficacia |
F.11 Aprendizaje |
F.12 Generatividad |
Alto |
37% |
58% |
31% |
37% |
Medio |
53% |
26% |
53% |
63% |
Bajo |
10% |
16% |
16% |
- |
Total |
100% |
100% |
100% |
100% |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
Este estudio revela que
un notable 58% de los participantes exhibe una autoeficacia elevada, elemento
central del componente “Yo Puedo”. Se observa una correlación positiva entre
resiliencia y autoeficacia, hallazgo que respalda la literatura previa (Wentzel y Miele, 2016; Williams y
Rhodes, 2016). En el contexto de la intervención temprana
para trastornos por consumo de sustancias, la autoeficacia adquiere una
importancia crítica, actuando como catalizador de la resiliencia y facilitando
una mejor adaptación a los desafíos (Fenwick-Smith,
Dahlberg y Thompson, 2018).
Basándose en estos descubrimientos, se han adaptado talleres de Sachs et al. (2003), para reforzar la resiliencia de
los participantes.
Tras haber finalizado
la intervención, se decidió llevar a cabo una evaluación utilizando el Test SV-RES con el objetivo de medir y
analizar los efectos de dicha intervención. A continuación, la Tabla 6 describe
de manera detallada y sistemática los resultados obtenidos de esta evaluación.
Tabla
6
Datos
comparativos del test SV-RES antes y después de la intervención
Nivel de resiliencia |
Antes % a |
Número de pacientes |
Después % |
Número de pacientes |
Alto |
37% |
7 |
74% |
14 |
Medio |
53% |
10 |
26% |
5 |
Bajo |
10% |
2 |
- |
- |
Total |
100% |
19 |
100% |
19 |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
El análisis de la Tabla
6, indica cambios significativos en los niveles de resiliencia de los pacientes
evaluados con el test SV-RES tras una
intervención específica. Inicialmente, el 37% (7 de 19) alcanzó un nivel alto
de resiliencia, incrementándose a 74% (14 de 19) post-intervención.
Simultáneamente, aquellos en el nivel medio de resiliencia disminuyeron del 53%
(10 pacientes) al 26% (5 pacientes). Notoriamente, quienes presentaban un nivel
bajo de resiliencia pre-intervención (10% o 2 pacientes) no figuraron en dicho
rango tras la intervención.
La intervención
terapéutica analizada mostró un impacto positivo en la fortificación de la
resiliencia de los pacientes, evidenciado por el auge en la categoría de resiliencia
alta. Estudios anteriores, como el de Heeks y Ospina (2019),
ya han identificado la resiliencia no solo como un atributo intrínseco, sino
también como una habilidad moldeable mediante intervenciones pertinentes.
La inexistencia de
pacientes en niveles bajos de resiliencia post-intervención resalta una
tendencia general hacia el bienestar, respaldada por investigaciones como la de
Gerber et al. (2019), que vinculan resiliencia
con desenlaces de salud favorables. El descenso en resiliencia media, junto con
el incremento en la alta, sugiere un desplazamiento de pacientes hacia mayores
niveles de resiliencia, subrayando la influencia positiva de intervenciones
adecuadas en su trayectoria resiliente.
Los resultados que se
muestran en la Tabla 7, indican una fuerte correlación entre identidad y
autonomía con resiliencia. Del total de individuos con alta resiliencia, el 84%
manifestó elevada identidad y autonomía; mientras que solo el 16% presentó
niveles medios y ningún individuo evidenció bajos niveles en estos componentes.
Estos hallazgos respaldan la idea propuesta por Lotz
(2016), de que una identidad clara y autonomía son esenciales para la
resiliencia, ofreciendo un propósito y capacidades autónomas para enfrentar
desafíos.
Tabla 7
Componente Yo Soy- Yo estoy (2da aplicación)
Nivel de resiliencia |
F1 Identidad |
F2 Autonomía |
F 3 Satisfacción |
F4 Pragmatismo |
Alto |
84% |
84% |
53% |
74% |
Medio |
16% |
16% |
37% |
21% |
Bajo |
- |
- |
10% |
0,5% |
Total |
100% |
100% |
100% |
100% |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
Por otra parte, el factor
“satisfacción” mostró una distribución más heterogénea. Aunque el 53% de los
individuos con alta resiliencia evidenció alta satisfacción, un 37% se situó en
el nivel medio y un 10% en el bajo. Según Martin et
al. (2016), la variabilidad podría deberse a la influencia de factores
externos y circunstanciales sobre la satisfacción, sugiriendo que no es tan
determinante para la resiliencia como lo son identidad y autonomía.
Adicionalmente, el 74%
de las personas con alta resiliencia mostró un alto nivel de pragmatismo; y, solo
el 21% y 0,5% presentaron niveles medios y bajos, respectivamente. Este dato,
en línea con Austin
y Gregory (2021), subraya que el pragmatismo, reflejando
la capacidad de adaptación y solución práctica, es una cualidad prominente en
individuos resilientes.
La Tabla 8, presenta
los hallazgos de la segunda aplicación del componente “Yo tengo”, mostrando una
proporción equitativa (47%) entre individuos con alta y media resiliencia, lo
que resalta la significancia de los vínculos en la vida de las personas,
independientemente de su nivel de resiliencia. Además, solo el 0,5% de los
individuos con baja resiliencia posee vínculos débiles, reafirmando la
centralidad de los vínculos seguros para la adaptación y recuperación ante la
adversidad, según Luthar, Lyman y Crossman (2014).
Tabla 8
Componente Yo tengo (2da aplicación)
Nivel de resiliencia |
F5 Vínculos |
F6 Redes |
F7 Modelos |
F8 Metas |
Alto |
47% |
79% |
37% |
58% |
Medio |
47% |
21% |
63% |
42% |
Bajo |
0,5% |
- |
- |
- |
Total |
100% |
100% |
100% |
100% |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
La mayoría (79%) de los
participantes con alta resiliencia tienen redes fuertes; mientras que solo el
21% con resiliencia media reportan lo mismo y ninguno en el grupo de baja
resiliencia. Esto concuerda con estudios de Saldarriaga
et al. (2022) de que las redes de apoyo
sólidas son esenciales para la resiliencia.
Por otra parte, el
componente “modelos” muestra una divergencia: El 63% de individuos con
resiliencia media poseen modelos sólidos, en contraste con el 37% en el grupo
de alta resiliencia, sugiriendo que las personas con niveles medios de
resiliencia podrían depender más de modelos como herramientas de guía, en
consonancia con Jones (2019).
Finalmente, el 58% de los participantes con alta resiliencia tienen metas
definidas en contraposición al 42% en el nivel medio. La ausencia de metas
claras en individuos con baja resiliencia refuerza el papel de las aspiraciones
como motor para enfrentar desafíos, tal como plantea Bush y Doyon (2019).
La Tabla 9, evidencia
la distribución porcentual de distintos factores asociados al componente “Yo puedo”
en relación con tres niveles de resiliencia: Alto, medio y bajo. En el factor
F9 Afectividad, es notable que el 53% de los individuos con alta resiliencia
también exhiben alta afectividad. Esta cifra contrasta con el 47% de los
individuos de resiliencia media. Intrigantemente, el grupo de baja resiliencia
no se representa en este factor. La afectividad puede ser vista como un pilar
en la construcción de la resiliencia. Tugade y Fredrickson (2007),
han subrayado cómo una regulación emocional saludable, reflejada en la
afectividad positiva, puede ser esencial para adaptarse y superar situaciones
adversas.
Tabla 9
Componente
Yo puedo (2da aplicación)
Nivel de resiliencia |
F9 Afectividad |
F10 Autoeficacia |
F11 Aprendizaje |
F12 Generatividad |
Alto |
53% |
63% |
53% |
58% |
Medio |
47% |
31% |
47% |
42% |
Bajo |
- |
0,5% |
- |
- |
Total |
100% |
100% |
100% |
100% |
Fuente: Elaboración propia, 2023.
El F10 Autoeficacia,
revela un predominio en aquellos con alta resiliencia, donde el 63% de estos individuos
manifiestan alta autoeficacia. En cambio, solo el 31% de aquellos con
resiliencia media la reportan. La presencia minúscula (0,5%) en el grupo de
baja resiliencia es testimonio de la importancia de este factor. Zaman et al. (2021), ha propuesto que la
autoeficacia, entendida como la creencia en las capacidades personales para
lograr objetivos, es un pilar en la adaptación y superación de desafíos. En
este contexto, la autoeficacia podría ser esencial para la robustez de la
resiliencia.
En cuanto al F11
Aprendizaje, la distribución es equitativa entre los niveles alto y medio de
resiliencia, 53% y 47% respectivamente. La ausencia total en el nivel de baja
resiliencia refuerza la significancia de este factor. Bowers
et al. (2017), han resaltado que el
proceso constante de aprendizaje y la habilidad para adaptarse cognitivamente
son cruciales para navegar a través de las adversidades.
Por último, el factor
F12 Generatividad, muestra que el 58% de los individuos con alta resiliencia
poseen alta generatividad, frente al 42% con resiliencia media. De nuevo, la
baja resiliencia no está representada. Newton,
Chauhan y Pates (2020), conceptualizaron
la generatividad como una preocupación por las futuras generaciones y un deseo
de contribuir al bien común. Este factor, en el contexto de la resiliencia,
podría indicar un compromiso más amplio con el crecimiento personal y
comunitario.
Conclusiones
Estos hallazgos
resaltan la importancia de abordar la resiliencia y los factores sociales en el
tratamiento de personas con trastorno por consumo de sustancias. La
identificación temprana de factores de riesgo, como el inicio del consumo en la
adolescencia y la influencia de amigos, puede ayudar a diseñar intervenciones
preventivas más efectivas. Asimismo, el fortalecimiento de los factores
resilientes, como la autoeficacia y los vínculos sociales, puede contribuir a
mejorar los resultados del tratamiento.
Además, los resultados
indican que existe una necesidad de implementar intervenciones específicas
dirigidas a la prevención y tratamiento del consumo de sustancias en la
población adolescente, considerando la influencia de los amigos como factor
determinante en el inicio del consumo. Es crucial desarrollar estrategias que
promuevan la resistencia a la presión social y fortalezcan las habilidades de
afrontamiento en esta etapa de la vida.
En relación a las
características demográficas, la predominancia de hombres en la muestra
refuerza la necesidad de abordar las diferencias de género en el tratamiento de
los trastornos por consumo de sustancias. Es importante considerar las
particularidades y necesidades específicas de cada género para diseñar
intervenciones más efectivas y centradas.
La presencia de niveles
promedio de resiliencia en la mayoría de los pacientes sugiere que poseen
ciertas habilidades y recursos para hacer frente a la adversidad. Sin embargo,
es fundamental trabajar en el fortalecimiento de estos niveles de resiliencia a
través de intervenciones terapéuticas adecuadas. La promoción de la
autoeficacia y el desarrollo de redes de apoyo social pueden ser aspectos clave
en el proceso de recuperación de los individuos con trastorno por consumo de
sustancias.
Referencias bibliográficas
Askew, R. (2016). Functional fun: Legitimising adult recreational drug
use. International Journal of Drug Policy, 36, 112-119. https://doi.org/10.1016/j.drugpo.2016.04.018
Austin, Z., y Gregory, P. (2021). Resilience in the time of pandemic:
The experience of community pharmacists during COVID-19. Research in Social
and Administrative Pharmacy, 17(1), 1867-1875. https://doi.org/10.1016/j.sapharm.2020.05.027
Bowers, C., Kreutzer, C., Cannon-Bowers, J., y Lamb, J. (2017). Team resilience
as a second-order emergent state: A theoretical model and research directions. Frontiers
in Psychology, 8, 1360.
https://doi.org/10.3389/fpsyg.2017.01360
Bradizza, C. M., Stasiewicz, P. R., y Paas, N. D. (2006).
Relapse to
alcohol and drug use among individuals diagnosed with co-occurring mental
health and substance use disorders: A review. Clinical Psychology Review,
26(2), 162-178. https://doi.org/10.1016/j.cpr.2005.11.005
Brownlee, K., Rawana, J., Franks, J., Harper, J., Bajwa, J., O’Brien,
E., y Clarkson, A. (2013). A systematic review of strengths and resilience
outcome literature relevant to children and adolescents. Child and
Adolescent Social Work Journal, 30(5), 435-459. https://doi.org/10.1007/s10560-013-0301-9
Bush, J., y Doyon, A. (2019). Building
urban resilience with nature-based solutions: How can urban planning
contribute? Cities, 95, 102483. https://doi.org/10.1016/j.cities.2019.102483
Carbia, C., Lannoy, S., Maurage, P., López-Caneda, E.,
O’Riordan, K. J., Dinan, T. G., y Cryan, J. F. (2021). A biological
framework for emotional dysregulation in alcohol misuse: From gut to brain. Molecular
Psychiatry, 26(4), 1098-1118. https://doi.org/10.1038/s41380-020-00970-6
Cos, T. A., LaPollo, A. B., Aussendorf, M., Williams, J. M., Malayter,
K., y Festinger, D. S. (2020). Do peer recovery specialists improve outcomes
for individuals with substance use disorder in an integrative primary care
setting? A program evaluation. Journal of Clinical Psychology in Medical
Settings, 27(4), 704-715. https://doi.org/10.1007/s10880-019-09661-z
Degenhardt, L., Stockings, E., Patton, G., Hall, W. D., y Lynskey, M.
(2016). The increasing global health priority of substance use in young people.
The Lancet Psychiatry, 3(3), 251-264. https://doi.org/10.1016/S2215-0366(15)00508-8
Deutsch-Link, S., Weinrieb, R. M., Jones, L. S., Solga, S. F., Weinberg,
E. M., y Serper, M. (2020). Prior relapse, ongoing alcohol consumption, and
failure to engage in treatment predict alcohol relapse after liver
transplantation. Digestive Diseases and Sciences, 65(7), 2089-2103.
https://doi.org/10.1007/s10620-019-05937-4
Fenwick-Smith, A., Dahlberg, E. E., y Thompson, S. C. (2018). Systematic
review of resilience-enhancing, universal, primary school-based mental health
promotion programs. BMC Psychology, 6(1), 30. https://doi.org/10.1186/s40359-018-0242-3
Finch, A. J., Tanner-Smith, E., Hennessy, E., y Moberg, D. P. (2018).
Recovery high schools: Effect of schools supporting recovery from substance use
disorders. The American Journal of Drug and Alcohol Abuse, 44(2),
175-184. https://doi.org/10.1080/00952990.2017.1354378
Gerber, M., Minghetti, A., Beck, J., Zahner, L., y Donath, L. (2019). Is
improved fitness following a 12-week exercise program associated with decreased
symptom severity, better wellbeing, and fewer sleep complaints in patients with
major depressive disorders? A secondary analysis of a randomized controlled
trial. Journal of Psychiatric Research, 113, 58-64. https://doi.org/10.1016/j.jpsychires.2019.03.011
Heeks, R., y Ospina, A. V. (2019). Conceptualising
the link between information systems and resilience: A developing country field
study. Information Systems Journal, 29(1), 70-96. https://doi.org/10.1111/isj.12177
Hoseiny, H., Jadidi, M., Habiballah, L., y Saberi-Zafarghandi,
M. B. (2015). The effect of methadone-maintenance therapy with and without interactive
treatment on improving emotion-regulation strategies and resilience among
opiate-dependent clients. International Journal of High Risk Behaviors and
Addiction, 4(1), e23526. https://doi.org/10.5812/ijhrba.23526
Jackson, S., y Goossens, L. (Eds.) (2020). Handbook of Adolescent
Development. Psychology Press. https://doi.org/10.4324/9780203969861
Jones, L. (2019). Resilience isn’t the same for all: Comparing
subjective and objective approaches to resilience measurement. WIREs Climate
Change, 10(1), e552. https://doi.org/10.1002/wcc.552
Kabisa, E., Biracyaza, E., D’Amour, J., y Umubyeyi, A. (2021).
Determinants and prevalence of relapse among patients with substance use
disorders: case of Icyizere Psychotherapeutic Centre. Substance Abuse
Treatment, Prevention, and Policy, 16(1), 13. https://doi.org/10.1186/s13011-021-00347-0
Kinyanjui, D. W. C., y Atwoli, L. (2013). Substance
use among inmates at the Eldoret prison in Western Kenya. BMC Psychiatry,
13(1), 53. https://doi.org/10.1186/1471-244X-13-53
Kossek, E. E., y Perrigino, M. B. (2016). Resilience: A review using a
grounded integrated occupational approach. Academy of Management Annals,
10(1). https://doi.org/10.5465/19416520.2016.1159878
Laudet, A. B., Morgen, K., y White, W. L. (2006). The role of social
supports, spirituality, religiousness, life meaning and affiliation with
12-step fellowships in quality of life satisfaction among individuals in
recovery from alcohol and drug problems. Alcoholism Treatment Quarterly,
24(1-2), 33-73. https://doi.org/10.1300/J020v24n01_04
López-Guerra, V. M., López-Núñez, C., Vaca-Gallegos,
S. L., y Torres-Carrión, P. V. (2022). Psychometric properties and factor structure of the
patient health questionnaire-9 as a screening tool for depression among
Ecuadorian college students. Frontiers in Psychology, 13, 813894. https://doi.org/10.3389/fpsyg.2022.813894
Lotz, M. (2016). Vulnerability and resilience: A critical nexus. Theoretical
Medicine and Bioethics, 37(1), 45-59. https://doi.org/10.1007/s11017-016-9355-y
Luigjes, J., Segrave, R., De Joode, N., Figee, M., y
Denys, D. (2019). Efficacy of Invasive and Non-Invasive Brain Modulation
Interventions for Addiction. Neuropsychology Review, 29(1), 116-138.
https://doi.org/10.1007/s11065-018-9393-5
Luthar, S. S., Lyman, E. L., y Crossman, E. J. (2014). Resilience and positive
psychology. In M.
Lewis y K. Rudolph (Eds.), Handbook of
Developmental Psychopathology (pp. 125-140). Springer. https://doi.org/10.1007/978-1-4614-9608-3_7
Martin, A., Karanika-Murray, M., Biron, C., y Sanderson, K. (2016). The psychosocial
work environment, employee mental health and organizational interventions:
Improving research and practice by taking a multilevel approach. Stress and
Health, 32(3), 201-215. https://doi.org/10.1002/smi.2593
Moos, R. H., y Moos, B. S. (2007). Protective resources
and long-term recovery from alcohol use disorders. Drug and Alcohol
Dependence, 86(1), 46-54. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2006.04.015
Nawi, A. M., Ismail, R., Ibrahim, F., Hassan, M. R., Abdul, M. R., Amit,
N., Ibrahim, N., y Shafurdin, N. S. (2021). Risk and protective factors of drug
abuse among adolescents: a systematic review. BMC Public Health, 21(1),
2088. https://doi.org/10.1186/s12889-021-11906-2
Newton, N. J., Chauhan, P. K., y Pates, J. L. (2020). Facing the future:
Generativity, stagnation, intended legacies, and well-being in later life. Journal
of Adult Development, 27(1), 70-80. https://doi.org/10.1007/s10804-019-09330-3
Nizama-Valladolid, M. (2016). Addictions in South America. In V. R.
Preedy (Ed.), Neuropathology of Drug Addictions and Substance Misuse
(Vol. 2, pp. 1066-1074). Elsevier. https://doi.org/10.1016/B978-0-12-800212-4.00098-4
Owens, R., Smalling, M., y Fitzpatrick, J. (2021). Mental health,
substance use disorder, and opioid uses disorder: updates and strategies for
treatment. SMAD,
Revista Eletrônica Saúde Mental Álcool e Drogas (Edição Em Português), 17(3), 88-100. https://doi.org/10.11606/issn.1806-6976.smad.2021.187412
Peacock, A., Leung, J., Larney, S., Colledge, S., Hickman, M., Rehm, J.,
Giovino, G. A., West, R., Hall, W., Griffiths, P., Ali, R., Gowing, L.,
Marsden, J., Ferrari, A. J., Grebely, J., Farrell, M., y Degenhardt, L. (2018).
Global statistics on alcohol, tobacco and illicit drug use: 2017 status report.
Addiction, 113(10), 1905-1926. https://doi.org/10.1111/add.14234
Pérez, J. M., Dorado, A.,
Rodríguez-Brioso, M. D. M., y López, J. (2020). Resiliencia para la promoción
de la salud en la crisis Covid-19 en España. Revista de Ciencias Sociales (Ve), XXVI(4), 52-63. https://doi.org/10.31876/rcs.v26i4.34649
Pilatti, A., Read, J. P., y Pautassi, R. M. (2017). ELSA 2016
Cohort: Alcohol, tobacco, and marijuana use and their association with age of
drug use onset, risk perception, and social norms in Argentinean College
Freshmen. Frontiers in Psychology, 8, 1452. https://doi.org/10.3389/fpsyg.2017.01452
Poudel, A., y Gautam, S. (2017). Age of onset
of substance use and psychosocial problems among individuals with substance use
disorders. BMC Psychiatry, 17(1), 10. https://doi.org/10.1186/s12888-016-1191-0
Rogers, S. M., Pinedo, M., Villatoro, A. P., y Zemore,
S. E. (2019). “I don’t feel like I have a problem because I can still go to work and
function”: Problem recognition among persons with substance use disorders. Substance
Use & Misuse, 54(13), 2108-2116. https://doi.org/10.1080/10826084.2019.1630441
Saavedra, E., y
Villalta, M. (2008). Escala
de resiliencia SV-RES para
jóvenes y adultos. CEANIM.
Sachs, G. S., Thase, M. E., Otto, M. W., Bauer, M.,
Miklowitz, D., Wisniewski, S. R., Lavori, P., Lebowitz, B., Rudorfer, M.,
Frank, E., Nierenberg, A. A., Fava, M., Bowden, C., Ketter, T., Marangell, L.,
Calabrese, J., Kupfer, D., y Rosenbaum, J. F. (2003). Rationale,
design, and methods of the systematic treatment enhancement program for bipolar
disorder (STEP-BD). Biological
Psychiatry, 53(11),
1028-1042. https://doi.org/10.1016/S0006-3223(03)00165-3
Saldarriaga,
O., Ledesma, M. J., Malpartida, J. N., y Diaz, J. R. (2022). Resiliencia
docente en las escuelas públicas de Lima Metropolitana – Perú. Revista de
Ciencias Sociales (Ve), XXVIII(1), 261-274. https://doi.org/10.31876/rcs.v28i1.37690
Tsourtos, G., Foley, K., Ward, P., Miller, E., Wilson, C., Barton, C., y
Lawn, S. (2019). Using a nominal group technique to approach consensus on a
resilience intervention for smoking cessation in a lower socioeconomic
population. BMC Public Health, 19(1), 1577. https://doi.org/10.1186/s12889-019-7939-y
Tugade, M. M., y Fredrickson, B. L. (2007). Regulation
of positive emotions: Emotion regulation strategies that promote resilience. Journal
of Happiness Studies, 8(3), 311-333. https://doi.org/10.1007/s10902-006-9015-4
Vargas, W. C., y García, M.
(2021). Resiliencia, comprensión psicosocial para los pospenados del Instituto
Nacional Penitenciario y Carcelario en Colombia. Revista de Ciencias Sociales (Ve), XXVII(E-3), 151-167. https://doi.org/10.31876/rcs.v27i.36499
Wentzel, K. R., y Miele, D. B. (Eds.) (2016). Handbook
of Motivation at School. Routledge. https://doi.org/10.4324/9781315773384
Williams, D. M., y Rhodes, R. E. (2016). The confounded self-efficacy
construct: Conceptual analysis and recommendations for future research. Health
Psychology Review, 10(2), 113-128. https://doi.org/10.1080/17437199.2014.941998
Witkiewitz, K., Bowen, S., Harrop, E. N., Douglas, H., Enkema, M., y
Sedgwick, C. (2014). Mindfulness-Based treatment to prevent addictive behavior
relapse: Theoretical models and hypothesized mechanisms of change. Substance
Use & Misuse, 49(5), 513-524. https://doi.org/10.3109/10826084.2014.891845
Zaman, U., Florez-Perez, L., Farías, P., Abbasi, S.,
Khwaja, M. G., y Wijaksana, T. I. (2021). Shadow of your former self: exploring project leaders’
post-failure behaviors (resilience, self-esteem and self-efficacy) in high-tech
startup projects. Sustainability, 13(22), 12868. https://doi.org/10.3390/su132212868
* Doctorante de la
Universidad “Marta Abreu de Las Villas” en Cuba. Magister en Gerencia Educativa.
Licenciada en Psicologìa Educativa. Docente del Departamento de Ciencias
Sociales de la Facultad de Ciencias Humanísticas en la Universidad Técnica de
Manabí, Manabí, Ecuador. Miembro de la Red Ecuatoriana de Investigación en
Resiliencia. E-mail: anicia.tarazona@utm.edu.ec
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-5126-3439
** Doctora Internacional en
Educación. Máster en Docencia e Investigación. Docente en la Universidad
Técnica de Manabí, Manabí, Ecuador. Investigadora reconocida por la Senescyt
ecuatoriana. E-mail: liliana.loor@utm.edu.ec ORCID: https://orcid.org/0000-0003-4747-4935
*** Máster en Psicología mención
Psicoterapia. Licenciada en Psicología. Miembro de la Red Ecuatoriana de
Investigación en Resiliencia, Ecuador. E-mail: taimynice@gmail.com ORCID: https://orcid.org/0000-0001-6471-6786
**** Máster en Intervención Social en las Sociedades del
Conocimiento. Licenciada en Trabajo Social. Docente de Medio Tiempo de la Facultad
de Ciencias Sociales, Educación Comercial y Derecho en la Universidad Estatal
de Milagro, Milagro, Ecuador. E-mail: jeni.96.06.08@gmail.com
ORCID: https://orcid.org/0009-0002-5872-9673
Recibido:
2023-04-02 · Aceptado: 2023-06-20