image

Depósito legal: ppi 201502ZU4635

Esta publicación científica en formato digital es continuidad de la revista impresa

Depósito Legal: pp 200402ZU1627 ISSN:1690-7582


Universidad del Zulia

Facultad de Humanidades y Educación Centro de Investigación de la Comunicación y la Información

(CICI)

Maracaibo - Venezuela


Volumen 18 No. 2 Julio - Diciembre 2021


image

QUÓRUM ACADÉMICO

Vol. 18 Nº 2, Julio-Diciembre 2021. Pp. 111-114

Universidad del Zulia


image

El periodismo ante la desinformación

image

Fundación Gabo Cartagena, Colombia 2021


La desinformación siempre ha sido tanto un problema como un desafío y, a la vez, una oportunidad para los medios de comunicación y los periodistas. De esta premisa parte el libro "El periodismo ante la desinformación", obra publicada por la Fundación Gabo en el marco de su programa "Ética periodística".


Para Jean-François Fogel, quien es maestro y presidente del Consejo Rector de la Fundación Gabo, "la desinformación es el resultado de la información errónea, que no es creada con la intención de hacer daño, y de información perjudicial, que es aquella que parte de la realidad con la intención de dañar personas, instituciones, organizaciones o países". Por lo tanto, la desinformación es un fenómeno especialmente dedicado a ayudar a aquellas agencias o grupos en la infoxicación de las audiencias.


Hoy en día, la tecnología es una valiosa herramienta de trabajo para estos grupos u organizaciones que se dedican a la desinformación. La razón detrás de esto es muy simple: existen más de 3.000 millones de usuarios entre todas las redes sociales (Facebook, Twitter, Whatsapp como las más usadas) y una vez que se genera contenido falso, y este empiece a ser compartido, se convierte en una ola que nadie puede detener. En este sentido, la tecnología constituye otro vehículo que moviliza facilmente la desinformación y



image Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento - NoComercial - CompartirIgual 3.0 Unported.


112

Fundación Gabo Quórum Académico, Vol. 18, Nº 2, Julio-Diciembre 2021, Pp. 111-114

image


resulta común que se abuse de ella para que grandes líderes enviados por organizaciones o grupos organizados tomen el control de lo que se desee.


Frente a esta realidad, existen agencias dedicadas al estudio y desmontaje de la información falsa que circula por los medios. Algunas de estas son: Global Disinformation Index, Double Verify, y The Project on Computational Propaganda, de la Universidad de Oxford. Por otro lado, también, se cuenta con algunas herramientas en línea para investigar la procedencia de la información, tales como Google Fact Check Tools, Wolfram Alpha e International Fact-Checking Network. Esto recursos fueron diseñados con el objetivo de combatir la desinformación desde el propio campo periodístico.


Resulta importante mencionar que en uno de sus apartados, el libro rescata las palabras de Catalina Botero-Marino, abogada y decana de la Facultad de Derecho de la Universidad de los Andes, quien indica que el Estado no tiene el derecho de definir qué es verdad y qué es mentira respecto a lo que circula en la Internet, tomando en cuenta que es una red global, descentralizada y abierta. Esta red de redes se caracteriza por estar llena tanto de información como de desinformación sin control, la cual es compartida por los usuarios sin un mínimo de verificación. Toda esta dinámica afecta, sin duda, los pilares de cualquier orden democrático.


Por lo tanto, para fortalecer la democracia en medio del panorama desinformativo, resulta necesario contar con ciudadanos debidamente informados, con conocimiento y pasión por la democracia, así lo comenta el escritor italiano Alessandro Barrico. Para esto, es imprescindible alcanzar la alfabetización digital, en la que se les de a conocer el adecuado uso de los medios y puedan navegar en este océano informativo sin ser presas de la información falsa.


Una sugerencia que se hace desde esta obra, para combatir cualquier desinformación, es verificar lo que se publica en todos los medios de comunicación antes de decidir compartirla con otros usuarios. Igualmente, en este mismo libro, Catalina Botero otras ideas que pueden aportar soluciones para contribuir a la democracia de la información, lo que convierte a este libro en una valiosa referencia tanto para estudiantes de periodismo como para las audiencias en general.


Actualmente, el avance tecnológico causa serias dificultades a los medios de comunicación tradicionales para competir con el flujo informativo en redes sociales. Esto los lleva a aprovechar todo lo que estas pueden ofrecer y mostrar en cuanto a contenidos y sus tendencias con el objetivo de mejorar

El periodiso ante la desinformación 113

image


sus relaciones con las audiencias. Dicha situación los convierte, en no pocas ocasiones,en víctimas y cómplices del juego desinformativo.


Otro aporte que recoge este libro es el que hace Patrícia Campos Mello, reportera y columnista de Folha de S. Paulo, quien señala que lo mejor para atacar la desinformación es por medio de la verificación. En este sentido, realizar toda una búsqueda sobre cualquier información de dudosa credibilidad, constituye una alternativa para seguir el camino de la noticia falsa.


Sobre la relación entre la desinformación y el mundo de la política, Mello explica que resulta muy común cómo los políticos han utilizado fenómeno para sus propias campañas, siendo WhatsApp una de las redes sociales más utilizadas en la difusión de información fraudulenta. El trasfondo de esta estrategia es la generación de un estado de confusión dentro de los electorados y la opinión pública.


Entre otras estrategias empleadas se encuentran las campañas de desprestigio hacia los medios de comunicación y periodistas reconocidos entre las audiencias. Los blancos de estos ataques suelen ser figuras mediáticas que acostumbran ir en contra la desinformación, lo que crea mayor confusión entre la opinión pública sobre lo que es cierto y lo que no.


En la actualidad, la tecnología avanza a pasos muy rápidos y va tomando delantera sobre muchas áreas de la vida cotidiana Es por eso que, para este mundo tecnológico, se necesita un mayor trabajo pariodístico que permita analizar con mayor profundidad todas las informaciones circulantes, utilizando las misma herramientas digitales que estas usan para multiplicarse y llegar a millones de usuarios.


Desde una perspectiva personal, puede afirmarse que el periodismo no está acercándose a un punto de crisis por el avance tecnológico; por lo contrario, se debe perfeccionar el periodismo actual para saber aprovechar las nuevas herramientas que se han ido creando y a fin de facilitar un adecuado acomplamiento a este mundo digital en el que vivimos y convertirnos en aliados de las plataformas digitales.


Finalmente, se puede decir que en esta obra titulada "El periodismo ante la desinformación" se describen con gran detalle los diferentes procesos asociados a los fenómenos de la desinformación, así como también se proponen algunas estrategias para combatir cualquier tipo de información falsa. Para esto, grandes especialistas en el área de la comunicación y otras áreas, tales como Jean-François Fogel, Patrícia Campos Mello, Catalina


114

Fundación Gabo Quórum Académico, Vol. 18, Nº 2, Julio-Diciembre 2021, Pp. 111-114

image


Botero-Marino, Alessandro Baricco, Jordi Pérez Colomé intervienen en este trabajo con diversas y enriquecedoras aportaciones.


Igualmente, estos autores brindan todos sus conocimientos sobre los diversos temas en relación a la desinformación en el contexto tecnológico actual. Además, en uno de los últimos apartados, este libro hace un reconocimiento del esfuerzo realizado por las grandes agencias mediáticas que se dedican a investigar las desinformaciones y el trabajo que hacen muchos medios de comunicación, en conjunto con los periodistas, en la verificación informativa.


Si bien se aclara que alcanzar la objetividad en el campo mediático resulta utópico, la honestidad sí es posible, según lo expresa Fogel. Para esto, es preciso hacer uso de las herramientas tecnológicas para la verificación de la información y educar a las audiencias en estos mismos procesos.

Leonardo Méndez Páez


Universidad del Zuia mendezleonardo1302@gmail.com