Revista de Ciencias Humanas y Sociales
© 2022. Universidad del Zulia
ISSN 1012-1587/ ISSNe: 2477-9385
Depósito legal pp. 198402ZU45
Portada: Nos Miramos
Artista: Rodrigo Pirela
Medidas: 150 x 100 cm
Técnica: Acrílico sobre tela
Año: 2014
Año 38, Especial No. 28 (2022): 253-269
ISSN 1012-1587/ISSNe: 2477-9385
DOI: https://doi.org/10.5281/zenodo.7487436
Recibido: 19-06-2022 Aceptado: 21-07-2022
Género, emociones y discursos de profesoras
universitarias en el confinamiento social
Olga Nelly Estrada
Universidad Autónoma de Nuevo León, México
ORCID:.0000-0002-3400-569X
olganellye@yahoo.com
Isabel Izquierdo
Universidad Autónoma del Estado de Morelos, México
ORCID: 0000-0002-3682-6862
isaizquierdo9@gmail.com
Resumen
Se analizan las narrativas de un grupo de mujeres a través de
entrevistas semiestructuradas, realizadas en el 2020-2021 durante el
confinamiento social del Covid-19. Se estudian las problemáticas que
enfrentaron las profesoras mexicanas con respecto a su trabajo
académico, la institución universitaria, su rol de género y las emociones.
Los resultados muestran que las tensiones se centraron en el manejo de la
tecnología, el género y la doble y triple jornada de trabajo, el manejo de
las emociones; las estrategias que utilizaron fueron: la solidaridad
comunitaria, cooperación entre pares, redes de apoyo, capacitación
tecnológica y la atención psicológica, tanto virtual como presencial.
Palabras clave: mujeres; género; Covid-19; profesoras; emociones
Gender, emotions and speeches of female university
teachers in social confinement
Abstract
The narratives of a group of women are analyzed through semi-
structured interviews, which were carried out in 2020-2021, during the
social confinement Covid-19. The problems faced by female Mexican
teachers with respect to their academic work, the university institution,
their gender role and emotions are studied. The results show that the
tensions were centered on the management of technology and gender on
the double and triple work shift, as well as the management of emotions;
the strategies that they implemented are community solidarity,
cooperation between peers, support networks, technological training and
psychological care, both online and in face to face.
254 Olga Nelly Estrada et al.
Opción, Año 38, Especial No.28 (2022): 253-269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
Keywords: women; gender; Covid-19; teachers; emotions.
1. INTRODUCCIÓN
En el estudio que presentamos, se describen y analizan los
discursos que expresaron las académicas mexicanas y se encontró que las
condiciones inequitativas preexistentes tales como la división sexual del
trabajo basada en estereotipos de género y confinamiento por la
pandemia, acrecentó una serie de emociones, entre ellas: cansancio,
frustración, miedo a enfermarse durante la actividad académica y
sobresaturación de actividades del rol de género que les ha asignado el
sistema patriarcal para que las mujeres asuman las actividades domésticas
como mandatos culturales. Asimismo, las limitó para enfocarse en lo
profesional y esto repercutió, en la disminución de su productividad
científica y académica.
La pandemia afectó más de manera negativa la vida de las mujeres
que a los hombres, por el llamado suelo pegajoso, la doble y triple jornada
por las horas que dedicaron en lo doméstico (INEGI, 2020), sin
embargo, las académicas implementaron una serie de acciones para
enfrentarlo, como el uso de las nuevas tecnologías para la enseñanza,
colaboración a distancia con sus pares y la habilidad para tener
capacitación virtual y realizar seminarios, así como obtener terapia
psicológica para disfrutar el uso del tiempo en familia y sobrellevar el
estrés y la ansiedad que les causó la pandemia.
En este tenor, investigaciones recientes señalan que el trabajo a
distancia ha traído diferentes vicisitudes en la vida de las académicas
mexicanas por el inesperado cambio del trabajo presencial al virtual.
Investigadoras como (SALDIVAR y RAMIREZ, 2020) sostienen que los
efectos del confinamiento y el cambio de actividades del personal
académico y científico producen estrés, cansancio, frustración. Por otro
lado, en la investigación de académicas mexicanas en pandemia
(IZQUIERDO, ESTRADA y STÍNCER, 2022) se describen situaciones
similares y añaden ausencia de motivación e incertidumbre por la salud y
el futuro laboral.
La falta de ánimo y desmotivación han sido los síntomas más
recurrentes de acuerdo con los resultados de las entrevistas que se
aplicaron durante la pandemia (2020 y 2021). Los usos de las nuevas
tecnologías y la sobrecarga en el horario laboral -cuando no se respetan
Género, emociones y discursos de profesoras universitarias en el confinamiento
social
255
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
horarios y rutinas, en particular en el trabajo doméstico-, ha formado una
nueva normalidad en el uso del tiempo.
La pandemia implicó múltiples cambios en la vida de las mujeres, y
en este caso de las académicas, cuando se ven forzadas a trasladarse de las
actividades escolares a espacios en donde se llevan a cabo las dinámicas
familiares e invasión de la privacidad, con todo ello se produjo estrés,
ansiedad y miedo, la situación se tornó tensa en ocasiones y generó
conflictos por la necesidad de los espacios en el hogar, el reacomodo
doméstico y la enseñanza a distancia. Por otro lado, no solo afectó a las
docentes, sino a todo el estudiantado que tuvieron que acudir al
confinamiento, en una etapa de su vida de formación y socialización. Lo
s difícil para el profesorado fue aprender a utilizar las herramientas de
las nuevas tecnologías, esas tensiones se visibilizaron con mayor
frecuencia en las y los docentes de mayor edad.
2. FUNDAMENTOS TEÓRICOS EN EL CONTEXTO DE LA
PANDEMIA Y LAS ACADÉMICAS EN MÉXICO
Vivimos una situación sin precedentes en el tercer mes del año
2020, la emergencia del Covid-19 ha tenido un impacto definitivo en los
centros educativos, en las y los docentes, el alumnado y sus familias. El
impacto fue de inmediato y las autoridades tomaron decisiones urgentes
para prevenir la pérdida del año escolar y dar cierta continuidad a los
estudios a distancia. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud
salva guardar la vida era lo más importante y seguir las indicaciones
sanitarias era la prioridad, sana distancia, no tocarse y recluirse en los
hogares para establecer situaciones de salud. (OMS, 2020). Todo esto
trajo incertidumbre y miedo a la mayoría de la población estudiantil,
profesorado y administrativos.
Por otro lado, la profesión docente quedó reducida a lo técnico
que elige materiales para trabajar con sus estudiantes a través de las tic´s.
Primero se pensó en capacitar a las y los maestros en dos semanas,
después del receso de las vacaciones, para reiniciar las clases presenciales
a corto plazo, pero esto no sucedió así y se extendió a casi dos años de
manera virtual. Asimismo, la institución ofreció capacitación todo el año
de manera intensiva, por primera vez, no se tuvieron vacaciones de
verano para las y los docentes en el 2020. Pero en ese contexto, no se
analizaron las condiciones del profesorado ni de las familias y se hicieron
actividades extenuantes que emocionalmente saturaron más al
256 Olga Nelly Estrada et al.
Opción, Año 38, Especial No.28 (2022): 253-269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
profesorado femenino por la doble y triple jornada, tensionando dos
principales esferas: la académica y la doméstica en el mismo espacio.
El panorama laboral de las mujeres antes de la pandemia no era
nada alentador y con la pandemia se agravó su situación laboral,
económica, de salud, de los cuidados, etc. De acuerdo con datos del
INSTITUTO NACIONAL DE LAS MUJERES DE MÉXICO (2020), 9
de cada 10 cuidadoras primarias es de sexo femenino, es decir que
quienes estaban antes de la pandemia en las casas a cargo de niñas, niños,
adolescentes, personas con discapacidad y adultos mayores, eran mujeres.
Estos datos demuestran que las tareas de cuidados recaen principalmente
en las mujeres sin importar su escolaridad, posición económica y/o edad.
Las mujeres mexicanas destinan 50.1 horas semanales, en tanto que los
hombres solamente 17.6 horas, evidenciando una brecha de 32.5 horas
(INSTITUTO NACIONAL DE ESTADÍSTICA Y GEOGRAFÍA,
2018).
Este estudio se enfoca en las mujeres pues han sido ellas las que
más han resentido la pandemia y han cargado con el peso de los cuidados
del hogar como ya se vio con las estadísticas del INEGI, atender tareas
de las hijas y los hijos, además sobrellevado la crisis de la salud,
implementado estrategias económicas para sobrellevar el presupuesto de
los gastos en casa, buscando formas de alimentarse mejor, con todo ello,
aumentaron las actividades en casa y sufrieron desgaste emocional, físico,
pero sobre todo aumentó la violencia de género durante la pandemia
(PILA y ESTRADA, 2021). Se tiene conocimiento que durante la
pandemia, se hicieron muchas más iniciativas en contra de la violencia de
género y a favor de una vida libre de violencia para las mujeres
(ESTRADA, 2022).
En este sentido, (LAGARDE, 2006) comenta que las mujeres
tenemos herencias culturales y determinantes sociales que están ligadas a
creencias y tradiciones que se desarrollan en nuestra cultura como
naturales y que nos ubicaban en el ámbito de lo privado, todo lo anterior
debe reconstruirse para crear una nueva visión de libertad y de poder para
resistir la dominación de la cultura patriarcal. De acuerdo con (LAMAS,
2007, p.4) define el género, como el conjunto de creencias, prescripciones
y atribuciones que se construyen socialmente tomando la diferencia
sexual como base.
Por otro lado, las situaciones de violencia descritas, se agravan por
la persistencia de prejuicios en contra de las mujeres en el ámbito público
Género, emociones y discursos de profesoras universitarias en el confinamiento
social
257
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
y laboral en el cual persiste el imaginario de lo femenino como inferior o
menos cualificado, afectando de forma negativa en el mantenimiento del
techo de cristal (ESTRADA y PILA, 2021). La intención de este estudio
es analizar las experiencias de la vida cotidiana, laboral, familiar y
emocional para reflexionar qué ha pasado con las mujeres académicas en
medio de la pandemia del Covid-19 y, a partir de ello, visibilizar las
desigualdades preexistentes que han impactado en su calidad de vida en
medio de la crisis.
3. METODOLOGÍA
Para explorar en todo lo anterior, se realizó este estudio, de corte
exploratorio cualitativo con entrevistas semiestructuradas a un grupo de
profesoras investigadoras mexicanas de tiempo completo, con más de
diez años en la enseñanza superior, en seis universidades públicas
mexicanas. Los rangos de edad de las académicas están entre 34 a 67
años, lo que significa que sus trayectorias laborares se encuentran en tres
etapas diferentes: iniciando, en desarrollo y consolidada.
Con el propósito de analizar algunas de esas problemáticas, se
analizaron las narraciones de las participantes en el estudio, en cuatro ejes:
1) Las actividades laborales presenciales versus trabajo en casa “home
office”; 2) Las actividades escolares versus falta de habilidades
tecnológicas; 3) La institución y familia versus roles de género y violencia;
y 4) Las emociones versus apoyo institucional y familiar.
De acuerdo con (BRUNER, 2002), la narración es un instrumento
del conocimiento humano, cuando alguien narra, reorganiza la
experiencia y vivencia personal y otorga un significado y la valoración del
mismo. Es decir, la narración es un importante instrumento para conocer
al otro y aquí la sugerencia de RICOEUR (2006) para quien los relatos
son modelos para volver a describir el mundo.
4. ANÁLISIS Y RESULTADOS DE LAS ACTIVIDADES
ACADÉMICAS PRESENCIALES VERSUS TRABAJO EN CASA
“HOME OFFICE”
En Latinoamérica, la mayoría de los empleos de alta dirección es
precedida por los hombres y en cuanto a la academia, las direcciones
administrativas las llevan a cabo en un alto porcentaje de varones pues
son ellos quienes tienen más tiempo para desarrollarse profesionalmente
258 Olga Nelly Estrada et al.
Opción, Año 38, Especial No.28 (2022): 253-269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
pues dedican menos tiempo a las tareas domésticas y además, tienen a
alguien para solucionar éstas responsabilidades (PILA y ESTRADA,
2022). Por su parte, en la estadística del INEGI, se señala que las mujeres
destinamos 50.1 horas semanales, en tanto que los hombres solamente
17.6 horas, evidenciando una brecha de 32.5 horas (INEGI, 2018). En la
última encuesta del Uso del Tiempo para actividades en casa, se muestra
que las mujeres invierten un promedio semanal de 26 horas y los
hombres solamente 11 horas (INEGI, 2019). Según datos de la oficina de
Igualdad de Género de Naciones Unidas para el Desarrollo (2020) la
crisis económica tiene efectos específicos en las mujeres al representar el
75% de cuidadoras totales y el 45% del total de la población que asume la
responsabilidad de las tareas del hogar.
En la investigación encontramos que las académicas -quienes
trabajan desde casa- enfrentan dificultades para armonizar tiempos y
demandas laborales, familiares y aún s aquellas que tienen hijas e hijos
menores de edad en casa, ya que intervienen con actividades extra
escolares, lo que puede provocar frustración, altos niveles de estrés y un
desgaste físico, económico y emocional.
Hoy en día feministas como LAGARDE (2006) y PACHECO
(2010) han definido a la división sexual del trabajo como el reparto
impuesto por el sistema sexo-género de las tareas y actividades de
acuerdo con el sexo de los sujetos, el cual aporta a la producción y
reproducción de los roles de género (FERNÁNDEZ, 2012). Estas
diferencias de actividades van en conjunto con la valoración diferenciada
y jerarquía, por lo que tiene impactos en el imaginario colectivo social
directos en la vida de las mujeres y los hombres.
Como señaló la filósofa Simone de Beauvoir (1999), en El segundo
sexo (1949), la condición desigual de las mujeres se debe a que el
patriarcado impuso estereotipos y un mandato cultural de inferioridad
sobre las mujeres como norma social y legal. La división sexual del
trabajo se basa sobre los estereotipos de género, por lo que naturaliza los
roles relativo al cuidado, la esfera privada y doméstica para las mujeres y
beneficia a las familias, sin embargo, daña y limita el tiempo que tienen las
mujeres destinado para la profesionalización y superación personal.
Como se observa, analizaremos diversas narrativas del discurso
que tuvimos en la entrevista como instrumento para conocer las vivencias
que han utilizado las académicas, con el objetivo de llegar a su
interpretación social, laboral y emocional, para ello, se analizaron los
Género, emociones y discursos de profesoras universitarias en el confinamiento
social
259
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
relatos con el propósito de detectar los elementos lingüísticos que
permiten la construcción del género, del sexismo, subordinación y
estereotipo cultural femenino diseñado por el mandato patriarcal,
visibilizando el efecto que tiene en el ámbito discursivo como interacción
social para interpretar el contexto en el que se desarrolla la situación de
vida de las académicas, en medio de la pandemia por el Covid-19:
Yo tenía que hacer mi trabajo administrativo, mi trabajo de
docente, ayudar a mi hijo en su escuela, estar embarazada y
limpiar la casa, entonces para eso fue lo que al principio
fue muy pesado y muy desafiante ahorita puedo decir que
ya me acostumbré a estar en lo doméstico otra vez pues no
hay más quien lo haga, no le voy a decir que me encanta
limpiar la casa pero ya tenemos ciertos roles pues
obviamente con el nacimiento del nuevo bebe mi esposo
hace unas cosas yo hago otras, pero la de la carga pesada
soy yo. Los momentos que él está conmigo me ayuda, pero
pues de todas formas el lunes regresa a trabajar y todo va a
recaer en otra vez y recién tengo días con el nacimiento
del bebé (UANL, 34 años).
Mediante el uso de los verbos de acción (hacer, ayudar, estar ) se
da a conocer esta diferenciación de la que habla LAMAS (2007), cuando
dice que “en todas las culturas, la diferencia sexual aparece como el
fundamento de la subordinación o de la opresión de las mujeres” (2007,
p. 4), pues en este comentario se presenta un juego discursivo en las que
ser hombre se manifiesta como una ventaja (“me ayuda”, “no le
corresponde hacer”) y, por el contrario, ser mujer (rol normalizado “estar
en lo doméstico”), es un rol por ser madre y cuidadora, no importa la
jerarquía que se tenga en lo laboral, la casa es su destino:
Mi marido da por hecho que no trabajo por el hecho de
estar en la casa, o sea, ahora que nos mandaron a trabajar a
la casa, pues él piensa que, porque estoy en la casa, debo
retomar las funciones o el rol que la sociedad y nuestra
cultura, me ha asignado como género […]. Antes ya
teníamos rutinas, él ya me había empezado a respetar, yo
trabajo, tengo un horario, yo llegaba a la casa y juntos
preparábamos algo. Ahora no, ya no, desde el
confinamiento ya no lo hace, el hecho de que me vea en la
casa, para él es como invisibilizar mi actividad como
maestra, llega gritando, quiere que le de comer, a veces
260 Olga Nelly Estrada et al.
Opción, Año 38, Especial No.28 (2022): 253-269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
estoy en clase y, pues, tengo que apagar el micrófono
porque pasan esas situaciones, él gritando, es muy tenso
(UAQ, 54 años).
Con el propósito de estudiar los diferentes significados en el
discurso de las académicas que utilizan para acreditar su trabajo
académico como el doméstico, así como la imagen del deber ser mujer,
femenina, propuesta por LAGARDE (2006), a fin de conocer los
estereotipos de género y los diferentes aspectos que rodean a las mujeres
en ésta pandemia, se puede identificar en los relatos el rol de género muy
marcado en cuanto quien es la encargada del espacio doméstico, según el
discurso de la profesora de la cita anterior el hecho de que me vea en la
casa, para él es como invisibilizar mi actividad como maestra”, el marido
no acepta el rol de su esposa como maestra, pero el de ama de casa
donde normaliza el cargo doméstico y, por lo tanto, usa un lenguaje
autoritario, normalizando sus tareas. En este sentido, REBOUL (1986)
afirma que no se habla como se quiere, debido a que sobre nuestro
lenguaje pesan ciertas coacciones sociales que operan en el nivel de la
lengua.
En el relato también se observa la doble y triple jornada de la
académica y eso le obstruye para dedicarle más tiempo a lo público. Se
establece en los relatos que la carga doméstica es solo de las mujeres y no
de los hombres. Todavía en el imaginario colectivo varonil, lo dan por un
hecho, aunque tengan estudios de posgrado, ellas son el sostén del hogar
y lo asumen como tal.
4.1 ACTIVIDADES ESCOLARES VERSUS FALTA DE
HABILIDADES TECNOLÓGICAS
Cuando se registró el primer contagio en México por la pandemia
en febrero del 2020 a causa del Covid-19, las autoridades empezaron a
establecer estrategias de salud para continuar con la enseñanza en las
escuelas, sin embrago, en el mes de marzo se tuvieron que cerrar y es
cuando se hicieron protocolos de emergencia para continuar la
escolarización en línea, todo era incertidumbre, porque no se tenía una
idea clara de cómo se debía continuar con las clases, ya que no estábamos
preparados/as para esta contingencia y se implementaron acciones
emergentes con clases en línea:
El contacto con los alumnos fue por celular, por la
computadora y ahorita las entregas de resultados son en
Género, emociones y discursos de profesoras universitarias en el confinamiento
social
261
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
línea, con formatos nuevos y se nos han cargado también
las materias de una forma diferente por ejemplo ahorita
tenemos el caso que no hemos podido revisar el examen
profesional porque lo administrativo de la facultad también
está súper lento, entonces también hay retrasos en ese tipo
para mostros. Y yo que no soy diestra en tecnologías y a
pesar de que tengo todo en casa me dieron nervios de
afrontar esta nueva etapa. Pues yo, para mi edad y que no
me gusta mucho la tecnología lo he llevado un poco mal,
tuvieron que venir a ponerme todo el sistema de zoom
porque no le entendía y entonces te mandan la indicación
de a tal fecha a tal hora (UAD, 67 años).
Organicé como pude, rapidísimamente mis clases, no perdí
absolutamente ninguna sesión de las que teníamos
programadas; […] ha sido muchísimo más el trabajo y no
nada más por las tecnologías, que eso también juega un
importante papel, que hay que aprender o actualizarse, que
no tienes Internet, o que no sirve tu computadora, varias
cosas, pero no, yo hablo de la mediación pedagógica, de
estar pensando mo le hago para que los procesos de
aprendizaje funcionen en estas condiciones (UG, 59 años)
En cuanto a la institución si he sabido de muchos casos
especialmente aquí en Zacatecas de familias de pocos
recursos que han tenido que hacer una inversión urgente
para poder recibir clases a distancia por la cuestión del
teletrabajo entonces tuvieron que invertir en computadoras,
internet, etc. Sobre todo, en municipios lejanos (UAZ, 54
años).
En el contexto de la pandemia y en el discurso de las profesoras
del estudio, comentaron que no tuvieron tiempo para procesar las
implicaciones que eso traería en la replanificación y continuidad de su
trabajo académico, así como en el uso y manejo de tecnología y de
plataformas en Internet. En ese sentido, identificamos diferencias frente
al uso y manejo de tecnologías entre las académicas con trayectorias
consolidadas y aquellas que están iniciando con su trayectoria laboral; con
todo ello, destaca la capacidad de adaptación y las diferentes acciones que
las profesoras pusieron en marcha, para hacer frente al uso de las
tecnologías. El aprendizaje tecnológico del personal docente como del
estudiantado fue de éxito para quienes tuvieron la infraestructura
262 Olga Nelly Estrada et al.
Opción, Año 38, Especial No.28 (2022): 253-269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
completa y para quienes no tuvieron la economía para solventarlo ni los
instrumentos necesarios, fue deficiente.
4.2 INSTITUCIÓN Y FAMILIA VERSUS ROLES DE
GÉNERO Y VIOLENCIA
La evidencia histórica muestra cómo a través del discurso
patriarcal, capitalista y sexista se ha tenido en desigual condición a las
mujeres. De acuerdo con MOSCOVICI (2008), las imágenes que
reproducimos desde el nacimiento son las representaciones sociales que
han sido fundamentales para manipular y predecir la realidad y el
comportamiento de las mujeres a través de la objetivación y el anclaje
histórico. Y, por otro lado, PACHECO (2010) advierte que sobre ellas se
estableció una violencia epistémica como mecanismo de exclusión a
través del lenguaje y de los saberes.
En ese sentido, el sistema sexo género ha establecido tareas
diferenciadas para ambos sexos, dejando que lo público perteneciera al
hombre y lo privado, a la mujer, contribuyendo así a una desigualdad en
las actividades. Además, la violencia de género ha crecido aún más en el
contexto pandémico y, por tal razón, se han hecho iniciativas de ley para
poder disminuir esta situación, aunque eso no ha sido suficiente para
erradicar los diferentes tipos de violencias en contra de las mujeres:
La salud mental se ha visto afectada por el encierro, por
ejemplo, los niños han tenido momentos donde quieren
salir y que ya no quieren estar encerrados. Con mi pareja,
por la misma situación de estar todos los días juntos… pues
si han llegado a haber problemas en el aspecto doméstico,
pero que se han logrado arreglar. En mi caso, mi pareja si
trata de entrarle al tema de la corresponsabilidad, sin
embargo, sigue habiendo situaciones que, por género,
siempre es la mamá la que debe atender. Entonces se ha
visto incrementada muchísimo más la carga de cuidados hacia
mi lado, por ser mujer (UAT, 43años).
La mayoría trabajamos, pero también se nos junta con los
hijos y por el hecho de estar en la casa que quieres estar
modificando que, si algo está sucio, lo vas a limpiar y el
esposo sigue con su rutina de irse al trabajo, comer allá,
llegar en la noche y quiere que le hagas de cenar (UANL, 34
años).
Género, emociones y discursos de profesoras universitarias en el confinamiento
social
263
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
Los discursos reflejan la desconsideración que tiene el esposo de la
académica (“llegar en la noche y quiere que le hagas de cenar”), existe una
exigencia de parte del hombre por el hecho de que la mujer se encuentra
en casa, es por ello que es importante reflexionar los mensajes y relatos
que recibimos desde el momento de nacer, ya que son mensajes distintos
en función de nuestro sexo y si consideramos que el lenguaje rige el
pensamiento, y que a través de él, no sólo transmitimos información y
conocimientos sino también cultura, valores, comportamientos, etc.,
entonces, podemos observar que también los estereotipos de género se
transmiten a través del lenguaje, puesto que éste es un importante agente
socializador a través del cual nos formamos como mujeres u hombres.
Los seres humanos tenemos una formación social, y de acuerdo
con PECHEUX (1970) es determinada por la estructura económica con
sus modos de producción, y el conjunto de relaciones que le son propias
y que influye en el individuo. Las formaciones imaginarias son aquellos
roles que el ser humano tiene según el público ante el que se encuentre.
Es decir, una mujer que es madre y maestra o profesora universitaria va a
desarrollar en el discurso su papel, sus formaciones imaginarias, según su
entorno social. Sin embargo, con la llegada de la pandemia, su discurso se
vio afectado en la dinámica social y grupal y con el entorno doméstico,
pues su imaginario social es del deber ser madre, ama de casa y en último
término, el ser maestra, tal y como se pudo observar en los relatos
anteriores.
Por otro lado, al concentrarse la docencia e investigación en las
casas de las profesoras, las actividades se extendieron, multiplicaron y el
trabajo se flexibilizó. En ese sentido, la casa se entiende como “el espacio
donde se llevan a cabo los rituales cotidianos que sostienen la vida de los
sujetos. Un espacio configurado a partir de lugares y objetos comunes:
dormitorios, cocina, baño y sala-comedor, entre otros” (TOLEDO y
AGUILAR, 2016, p. 196), es donde transcurre la vida cotidiana de las
profesoras y sus familias. En las casas también se concentran arenas de
tensión, violencias y constituyen el espacio más importante desde donde
se enfrentó el aislamiento social durante la pandemia, con todo lo que eso
implica. En el caso que nos ocupa, las casas fueron espacios residenciales,
pero también se convirtieron en una extensión de lo laboral remunerado,
a través del trabajo académico flexible y no remunerado, con el trabajo
doméstico y familiar, éste último pocas veces reconocido y regulado por
instancias institucionales que, por los roles de género, se responsabiliza a
las mujeres.
264 Olga Nelly Estrada et al.
Opción, Año 38, Especial No.28 (2022): 253-269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
4.3 LAS EMOCIONES VERSUS APOYO
INSTITUCIONAL Y FAMILIAR
Otro de los aspectos que se observaron en los relatos de las
académicas fue el efecto emocional que trajo el trabajo en casa, y que ha
llevado a un imaginario colectivo de incertidumbre y desvalorización de la
salud física y de las emociones. Las emociones son respuestas químicas y
neuronales automáticas que provocan cambios corporales y según
DAMASIO (2006) en tiempos de pandemia y crisis catastróficas o la
ruptura con lo cotidiano y de los hábitos de vida, se desarrolla ansiedad,
depresión y hasta neurosis, asimismo, después de una pandemia pueden
venir más enfermedades y afectaciones, desencadenando una serie de
conductas de pánico, conductas violentas y aislamiento (OMS, 2006).
De acuerdo con un estudio (MORGAN, 2020) sobre la ansiedad y
trastornos del sueño en estadounidenses, se identificó que los principales
conflictos es la sobrecarga del trabajo, la desigualdad que existe porque en
pocas escuelas pueden ofrecer una experiencia académica virtual
completa, con alumnos y alumnas que cuenten con dispositivos
electrónicos adecuados e infraestructura en casa y profesorado que estén
capacitados en cómo diseñar lecciones en línea funcionales y una cultura
basada en el aprendizaje tecnológico. Todo ello contempla un
desequilibrio en su normalidad de enseñar sus clases y como
consecuencia un desequilibrio emocional y de estrés, tal y como se
observa en las siguientes narrativas:
me sentí muy agobiada con todo, sobre todo porque no
hay explicación a lo que sucede y qué pasa con la gente que
está enferma y vi unos apoyos de la universidad que se
estaban brindado a través de la Facultad de Psicología y
otras ligas que se han dado a conocer para quienes lo
necesiten (UAD, 67 años).
Si pudiera resumir como me siento, pues te diría que me
siento viviendo en una incertidumbre tremenda, con temor
y agobio. Agobio porque, aunque estoy en aislamiento, no
puedo estar en un aislamiento contemplativo, todo el
tiempo es de trabajo, de estrés, a veces no tengo tiempo ni
para lo indispensable, para comer, ando comiendo ya
después de mucho rato porque, digo “primero acabo esto”
y cuando veo ya se me fue el tiempo (UG, 59 años).
Género, emociones y discursos de profesoras universitarias en el confinamiento
social
265
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
Hasta antes de la pandemia, los ámbitos de trabajo de lo
académico, familiar y doméstico quizá contaban con sus respectivos
espacios, pero con el confinamiento social, se mezclan y se superponen
aún s, dificultando la posibilidad de establecer algún tipo de límite
entre cada uno de ellos (si es que antes existían esos límites). En ese
sentido, la vida de algunas académicas mexicanas en tiempos de
pandemia, se encuentra tensionada y en un constante sobre esfuerzo
mental y emocional que puede verse reflejado en la vivencia y en sus
discursos, visibilizando angustia, incertidumbre, depresión y ansiedad que
manifiestan algunas de las profesoras.
5. REFLEXIONES FINALES
Este estudio, se analizó las experiencias de vida de las académicas
mexicanas, su rol de género y aspectos académicos laborales, así como sus
emociones en el contexto de la pandemia del Covid-19. En ese sentido,
tratamos de visibilizar cómo las desigualdades preexistentes impactan en
su calidad de vida en medio de la crisis. Al analizar las narraciones de las
académicas, se constata que las tensiones y problemáticas no son del todo
resultado de la pandemia, sino que se agudizaron en el confinamiento y se
evidencia que, a partir de la emergencia, se profundiza la división sexual
del trabajo y la doble y triple jornada de las académicas.
Las actividades laborales presenciales versus trabajo en casa se
agudizaron y más para las mujeres, a través de sus narraciones inferimos
que siguen los mandatos culturales de que las actividades del hogar solo
son para las mujeres no importando su rango jerárquico o si tienen un
empleo técnico o son profesoras. GARCÍA (1998) enuncia que “estos
ejemplos son una muestra del sexismo que hemos heredado y que nos
invade a todos, por causa de una costra cultural de carácter patriarcal
(p.21). Sabemos también que el lenguaje es cultural y aprendido y, por lo
tanto, modificando nuestro lenguaje estaremos, a la vez, modificando
estos estereotipos que perjudican tanto a mujeres como a varones.
Conocer qué efectos ha traído la pandemia en las emociones de
las académicas versus apoyo institucional y familiar será importante para
la salud y la vida de ellas, y para el proceso de enseñanza-aprendizaje
dentro y fuera del aula también, porque la salud mental y emocional es
básica para el desarrollo académico. Identificamos que la educación a
distancia obligatoria fue un profundo cambio de actividades educativas y
tecnológicas que fue un sobre esfuerzo y las emociones se sobresaltaron
266 Olga Nelly Estrada et al.
Opción, Año 38, Especial No.28 (2022): 253-269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
causando estrés y miedo. Por último, queremos mencionar que los
tiempos pandémicos nos proporcionaron la habilidad para conocerse más
a una misma y aprender otras habilidades que desconocíamos, pues
tuvimos momentos de reflexión para valorar más la vida y el quehacer
universitario.
6. AGRADECIMIENTO
Esta investigación titulada: Género, emociones y discursos de
profesoras universitarias en el contexto del Covid-19” fue realzada gracias
a la beca otorgada por PAICYT, UANL, 2021.
7. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
BRUNER, Jerome. 2002. La fábrica para hacer historias. Editorial
FCE, Buenos Aires (Argentina).
DAMASIO, Antonio. 2006. El error de Descartes. Editorial Crítica,
Barcelona (España).
DE BEAUVOIR, Simone. 1999. El segundo sexo. Editorial
Sudamericana, Buenos Aires (Argentina).
ESTRADA, Olga y PILA, Paola. 2021. Ética, género y discurso sexista
en la política mexicana”. En La ética en la concepción de
ciudadanía. Ediciones Universidad Santiago de Cali, Cali
(Colombia). Disponible en:
https://libros.usc.edu.co/index.php/usc/catalog/download/281/
400/6016?inline=1
ESTRADA, Olga. 2022. “Avances, retos y barreras de las legisladoras en
el primer congreso paritario en LXXV Legislatura del Estado de
Nuevo León”. En La paridad, una realidad aún por construir
en los congresos locales de México. Instituto Nacional
Electoral, México.
FERNÁDEZ, Ana. 2012. La violencia en el lenguaje o el lenguaje
que violenta. Ediciones UNAM, Xochimilco (México).
GARCÍA, Álvaro. 1998. Lenguaje y discriminación sexual. Editorial
Montesinos, Barcelona.
Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía. 2018. Uso del tiempo
[Presentación del seminario]. Seminario: La agenda 2030 para el
Desarrollo Sostenible y el seguimiento de sus objetivos en el
observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe.
Género, emociones y discursos de profesoras universitarias en el confinamiento
social
267
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
Santiago (Chile). Disponible en
https://www.cepal.org/sites/default/files/news/files/presentacio
n_mexico_inegi_-_uso_de_tiempo.pdf
Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía. 2020. Estadísticas a
propósito del día del trabajo datos nacionales [Comunicado de
prensa]. México. Disponible en:
https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/aproposito/
2020/trabajoNal.pdf Consultado el: 25.12.2021.
Instituto Nacional de las Mujeres de México. 2020. La vida de las
mujeres y el COVID-19. Impactos diferenciados y medidas
implementadas en la Jornada de Sana Distancia [Folleto].
Disponible en:
https://www.cepal.org/sites/default/files/document/files/mex_i
nmujeres_medidas_implementadas_en_jornada_de_sana_distancia
_200615.pdf
IZQUIERDO, Isabel, ESTRADA, Olga y STÍNCER, Danny. 2022.
Académicas mexicanas en tiempos de pandemia. Sociológica,
Revista del Departamento de Sociología. Año 37. No. 105.
UAM. México.
LAGARDE, Marcela. 2006. Los cautiverios de las mujeres: madre
esposas, monjas, putas, presas y locas. Ediciones UNAM.
México.
LAMAS, Marta. 2007. El género es cultura. Ediciones Almada,
Portugal.
MORGAN, Hani. 2020. “Best Practices for Implementing Remote
Learning during a Pandemic. The Clearing House: A Journal of
Educational Strategies”. En Issues and Ideas. Vol. 93. No. 3:
135-141. University of Southern Mississippi. Estados Unidos.
Disponible en:
https://www.tandfonline.com/doi/pdf/10.1080/00098655.2020.1
751480?needAccess=true
MOSCOVICI, Sergio. 2008. Psicología social, II: pensamiento y vida
social, psicología social y problemas sociales. Editorial Paidós,
México.
Naciones Unidas. Disponible en:
https://peru.un.org/sites/default/files/202007/SG%20Policy%2
0brief%20COVID%20LAC%20%28Spanish%29_10%20July_0.p
df Consultado el 20 de mayo 2022.
268 Olga Nelly Estrada et al.
Opción, Año 38, Especial No.28 (2022): 253-269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
Organización Mundial de la Salud. Disponible en:
https://iris.paho.org/handle/10665.2/2800 Consultado el 14 de
junio, 2022.
Organización Mundial de la Salud. Disponible en:
https://www.who.int/es/news-room/detail/27-11-2021-who-
timeline-covid-19 Consultado el 11de julio de 2022.
PACHECO, Lourdes. 2010. El sexo de la ciencia. Ediciones UAN,
Ciudad de México (México).
PECHEUX, Michel. 1970. Hacia el análisis automático del discurso.
Editorial Gredos, Madrid (España).
PILA, Paola y ESTRADA, Olga. 2021. Mujeres mexicanas y
ecuatorianas en el contexto del Covid-19: un acercamiento a
la vida cotidiana y laboral. En Estudio de la pandemia de
COVID-19 desde un acercamiento multidisciplinar. Editorial
Tirant lo Blanch, Ciudad de México (México). Consultado en:
https://issuu.com/tirantloblanch/docs/0b994062dfe617bc9ad1e6
9109002984
PILA, Paola y ESTRADA, Olga. 2022. Aproximación al ciberactivismo
feminista en Latinoamérica en el siglo XXI”. En Revista Política,
Globalidad y Ciudadanía, Vol. 8. No. 16: 24-47. Consultado en:
http://doi.org/10.29105/pgo8.16-2
REBOUL, Olivier. 1986. Lenguaje e ideología. Editorial Fondo de
Cultura Económica, México.
RICOEUR, Paul. 2006. “La vida: un relato en busca de narrador”. En
Papeles de filosofía. Revista Ágora, Vol. 25. No. 2: 9-22.
SALDIVAR, Alicia. y RAMÍREZ, Karol. 2020. “Salud mental, género y
enseñanza remota durante el confinamiento por el Covid-19 en
México”. En Persona, Vol. 23. No. 2: 11-40.
TOLEDO, M. y AGUILAR, M. 2016. En “Entre el afecto y las disputas:
la casa como espacio laboral feminizado”. Espacialidades
Revista de temas contemporáneos sobre lugares, política y
cultura, Vol. 6. No. 1: 193-219.
Género, emociones y discursos de profesoras universitarias en el confinamiento
social
269
Revista de Ciencias Humanas y Sociales. FEC-LUZ
BIODATA DE AUTORAS
Olga Nelly Estrada. Doctora en Humanidades y Artes. Profesora e
Investigadora de la UANL. Líneas de investigación: estudios de género,
violencia, discurso político y migración. Ganadora del premio “Sor Juana
Inés de la Cruz 2012” de tesis doctoral a Nivel Nacional con Mención
Honorifica del INM. Profesora visitante en el programa de
Investigaciones Conjuntas Matías Romero en la UT en Austin (2017).
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores Nivel 1 y Evaluadora
Nacional del PNPC de la Maestría y Doctorado en Humanidades por el
CONACyT, 2015-2017. Pertenece a la Asociación Española de
Investigaciones en Historia de las Mujeres y participa habitualmente en
los Seminario de Investigación y como sinodal de tesis con temáticas de
género, en la Maestría y Doctorado en Historia, UAZ y UANL.
Isabel Izquierdo. Doctora en Pedagogía por la Universidad Nacional
Autónoma de México (UNAM). Tuvo una estancia de un año académico
en la University of British Columbia (UBC), Canadá; estancias cortas en el
Instituto de Latinoamérica en Rusia y realizó trabajo de campo en la
Universidad de São Paulo, Brasil (como parte de su estancia posdoctoral
en la UAM-Azcapotzalco). Fundadora de la Red Académica en Migración
y Educación (RAME) y coordinadora de su seminario desde el 2012 y
hasta la fecha. Miembro del Consejo Mexicano de Investigación
Educativa (COMIE) y de la Red Movilidad y Migración Calificada de
América Latina (RMMCAL). Miembro del Sistema Nacional de
Investigadores, Nivel 1 y cuenta con el Perfil PRODEP, SEP.
UNIVERSIDAD
DEL ZULIA
Revista de Ciencias Humanas y Sociales
Año 38, Especial N° 28 (2022)
Esta revista fue editada en formato digital por el personal de la Oficina de
Publicaciones Científicas de la Facultad Experimental de Ciencias, Universidad del
Zulia. Maracaibo - Venezuela
www.luz.edu.ve
www.serbi.luz.edu.ve
produccioncientifica.luz.edu.ve