Enl@ce: Revista Venezolana de Información de, Tecnología y Conocimiento

ISSN: 1690-7515

Depósito legal pp 200402ZU1624

Año 11: No. 2, Mayo-Agosto 2014, pp. 115-125

E-learning. La revolución educativa

Mario H. Concha Vergara1

Resumen

Se abordan en este ensayo la variedad de mitos y desconocimientos en torno al sistema de enseñanza-aprendizaje denominado e-learning, contrastando cada uno con la realidad teórica y práctica del sistema. Ello, a partir de las distintas conceptualizaciones que se han ido forjando sobre el tópico, así como en torno a los enfoques cognitivos que esta modalidad de enseñanza integra. De igual modo, son abordados los principios que supone el diseño instruccional del referido sistema, y los desafíos, responsabilidades y ventajas que presenta para diseñadores, estudiantes y profesores que acceden a él, sin obliterar las tareas pendientes del Estado de Chile en esta materia.

Palabras claves: Alfabetización tecnológica, desarrollo, inclusión social.

1 Magíster en Comunicación y Tecnologías Educativas, Universidad UNIACC Egresado del Programa de Doctorado en Comunicación, Universidad UNIACC

Recibido: 19/02/14 Devuelto para revisión: 17/06/14 Aceptado: 12/07/14.

Como citar el articulo (Normas APA):

Vergara, M. (2014). E-learning. La revolución educativa. Enl@ce Revista venezolana de Información, Tecnología y Conocimiento, 11 (2), 115-125

E-learning, la revolución educativa

Mario H. Concha Vergara

Existen tantos mitos como cátedras funcionando en el sistema de capacitación virtual. Ahora, en el primer decenio del siglo XXI, en la sociedad del conocimiento, las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) tienen un rol muy importante, en cuyo marco surge el e-learning, que, según definición de la Comisión Europea, es “la utilización de las nuevas tecnologías multimediales y de Internet para mejorar la calidad del aprendizaje facilitando el acceso a recursos y servicios, así como los intercambios y la colaboración a distancia” (Aula Diez, 2009).

Otra definición es la que nos da Lozano (2009): “Una sencilla definición de e- learning es la formación que se imparte mediante el uso de las nuevas tecnologías, por tanto su distinción respecto con la educación tradicional se centra justamente en la enorme potencialidad y oportunidades que nos ofrecen las TIC para ser usadas como medio excelente para formar a la personas”.

Los mitos más difundidos sobre el e-learning son variados; de acuerdo a Barrientos y Villaseñor (2009) en su ensayo "De la enseñanza a distancia al e-learning". Consonancias y disonancias. En este documento, aseveran que un amplio número de mitos respecto al e-learning existen en la actualidad, agregando que, lamentablemente, “la industria del marketing desarrolla o refuerza muchos de estos mitos”, subestimando, los usuarios, esta nueva modalidad educativa y sobreestimando los logros que pueden alcanzar, lo que posteriormente ocasiona decepciones y frustraciones.

La subestimación y la sobreestimación tienen su origen en variados puntos de vista. Quienes piensan que estudiar con esta modalidad es muy fácil y, además, suponen que los alumnos egresados de alguna carrera dictada mediante e-learning no estarían suficientemente preparados para enfrentar la realidad como profesionales.

También están aquellos que, como estudiantes de algún sistema de esta modalidad, se dan cuenta de que hay que tener una gran capacidad cognitiva, esforzarse al máximo y perseverar en la autodisciplina, para lograr el ansiado título. Esto ha generado mitos sobre el sistema e-learning de enseñanza, el cual, como dice la definición no es otra cosa que “la utilización de las nuevas tecnologías multimediales y de Internet para mejorar la calidad del aprendizaje facilitando el acceso a recursos y servicios, así como los intercambios y la colaboración a distancia” (Aula Diez, 2009)

Mito: los cursos presenciales pueden transferirse a la web sin pérdida de su potencial de enseñanza.

Realidad: el sistema de enseñanza e-learning necesita considerar el conductismo, el constructivismo y el estructuralismo en igual medida1

Según Ordóñez (2009), las teorías del aprendizaje más representativas son el conductismo, el cognoscitivismo, el constructivismo y la cibernética (enfoque sistémico). Estas teorías, junto con la incorporación de las TIC para fines de aprendizaje, han desarrollado lo que se conoce como las generaciones de diseño instruccional G1, G2, G3 y G4 (Dick & Carey,1978., Keller, 1983; Merrill y Jones, 1990; Merrill, 1996 y Reigeluth, 1996; Axmann y Greyling, 2003; Van Gog, et al, 2005; Sumarni, (2007). Todos, citados por Ordóñez (2010).

Los profesores deberán poner énfasis en la necesidad del alumno de ser sus propios conductores. Una especie de orquesta educacional en la que interactúan como en una sinfonía, cuyo aspecto más relevante es no perder la armonía2.

Por otra parte, es necesario considerar las necesidades educativas, que no son otra cosa que:

las necesidades formativas que se originan por la distancia que existe entre lo que se

E-Learning, the Educational Revolution

Abstract

Are addressed in this essay the variety of myths and ignorance around the system of teaching-learning called e-learning, contrasting each one with the theoretical and practical reality of the system. This, on the basis of the different conceptualizations that have been forged on the topic, as well as on cognitive approaches that this modality of teaching integrates. Similarly, are dealt with the principles of instructional design of the system, and the challenges, responsibilities and advantages for designers, students and teachers to access it, without blurring the remaining tasks of the State of Chile in this area.

Key Words: Technological literacy, Development, Social inclusion.

O inventamos o erramos

S. Rodríguez

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1 El conductismo, el cognoscitivismo y el constructivismo explican de forma diferente el proceso de aprendizaje y tienen estrategias instruccionales asociadas que ofrecen caminos óptimos para lograr resultados deseados. No se debe restringir a una sola posición teórica y seleccionar los principios y conexiones que puedan tener mayor valor para una situación particular.

2 El movimiento del estructuralismo lingüístico se sitúa a comienzos del siglo XX, y constituye los inicios de la lingüística moderna. Su iniciador fue Ferdinand de Saussure con su obra Curso de lingüística general (1916).

El estructuralismo surge como una reacción y le da más importancia a la sincronía frente a la diacronía. Según esta teoría, el valor de cada elemento del lenguaje se define por oposición con los demás elementos.

Figura 1

Escala Conners para maestros.

lo que se debería saber, ser, querer y aportar (Marcelo, Puente, Ballesteros y Palazón, 2000).

Los objetivos y contenidos de la formación de los alumnos de e-learning, deben tomar como fundamento las necesidades de las que se parte en el proyecto educativo para que pueda ser útil y provechoso. Este nuevo sistema de formación busca un cambio en los conocimientos y en las actitudes, tanto de los alumnos como de los profesores, guías o instructores. Las necesidades educativas son muchas y vienen determinadas por un contexto determinado.

No existen objetiva y absolutamente, sino que se descubren o se construyen en función de la visión de futuro. Para Rodríguez (Concha, 2001), se trata de elaborar un pensamiento constructivita claro, profundo y significativo, que sea capaz de procesar y reelaborar la información; en otras palabras, el sistema requiere de un alumno crítico, participativo, capaz de esforzarse para usar su voluntad creativa mediante la motivación que obtendrá de sus pares y profesores. Rodríguez decía “o inventamos o erramos”, frase que encierra una tremenda sabiduría; esta, aunque planteada en el siglo XIX, aún tiene una gran vigencia, pues trata de impulsar al alumno y los maestros en pro de una situación de búsqueda permanente en el campo educacional

Mito: “Los cursos de e-learning son tan buenos o mejores que los cursos presenciales”.

Realidad: poner un curso en la web o en CD-ROM no asegura un mejoramiento del desempeño de los alumnos. Como hemos dicho, se requiere que los alumnos tengan la capacidad suficiente de establecer su objetivo, deseos y metas a través del esfuerzo, voluntad y motivación (ver fig. 1)

Fuente: elaboración propia, (2014).

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Mito: Todos aprenden en un ambiente de e-learning.

Realidad: Todos aprenden de diferentes maneras.

Mito: Trabajar y aprender son actividades separadas.

Realidad: Trabajar y aprender son lo mismo. Trabajar es aprender y aprender es trabajar (Parra y Villaseñor, 2009)

En definitiva, hay que tener claro que el e-learning, a pesar de sus diversas bondades, no es una panacea educacional. La educación, no depende de la tecnología empleada, sino del diseño de las actividades formativas.

Diseño

Es necesario elaborar un proceso ad-hoc que permita analizar las necesidades formativas, su medioambiente y circunstancias, por el cual es posible definir los objetivos educativos. De esta manera, se puede elegir los medios más adecuados, si se tiene presente los contenidos, interacciones y actividades formativas, diseñando además un sistema de evaluación y autoevalución. Todo ello, en suma, constituye la acción formativa.

Al diseñar un curso on-line (e-learning) se requiere acercarnos totalmente a las TIC, para poder, en definitiva, usar todos los recursos que ofrece el sistema. En este sentido, se debe tener en cuenta todos los elementos que permiten facilitar el uso de los materiales didácticos.

No se debe olvidar, que la metodología amerita estar al servicio del aprendizaje: aquí no hay espacio para las generalizaciones, lo cual podría ser un inmenso error educacional. Si tenemos programas y contenidos diversos, debemos recurrir a diversas metodologías, pues cada disciplina requiere métodos adecuados a su naturaleza.

El concepto de diseño educativo y de tecnología de la formación, se ha definido como el desarrollo sistemático de una acción formativa basado en las teorías del aprendizaje, con el fin de asegurar la calidad de la formación.

Las últimas tendencias se basan, con mucha fuerza, en el constructivismo como teoría que fomenta un aprendizaje basado en la experimentación; sin embargo, una acción formativa bien diseñada debería incorporar los aspectos más apropiados de cada una de las teorías del aprendizaje:

Eso es lo que, realmente como diseñadores de formación en entornos de aprendizaje concretos, tendríamos que esforzamos en conseguir. Combinando nuestra pericia y conocimiento de las teorías conductistas, cognoscitivitas y constructivistas del aprendizaje con otras disciplinas, podremos diseñar y ofrecer las soluciones más adecuadas a las diferentes situaciones de aprendizaje y mejorar los resultados (Guillespie, 1995).

Antes de instruir a un estudiante por medio del sistema de e-learning, se hace necesario considerar que el diseño tenga los perfiles de los estudiantes, con motivaciones y necesidades diversas, ya que los estilos de aprendizaje difieren entre si. Es importante guiar a los educandos, con la retroalimentación pertinente cuando sea necesario.

De esta manera, se requiere proponer los recursos metodológicos que hay que usar en función de los objetivos que se han propuesto. Por ejemplo: 1) para analizar y observar, casos prácticos; y 2) para discutir y argumentar, debates.

El diseñador debe encontrar el recurso más adecuado para cada una de las necesidades, mediante el diseño de las actividades de aprendizaje que permiten trabajar estrategias y que garanticen el aprendizaje. Para lograr esto, es necesario incluir actividades que cumplan requisitos basados en las teorías del aprendizaje, para:

• activar los conocimientos previos.

• orientar el aprendizaje.

• presentar los contenidos.

• incitar al estudiante a participar activamente.

• proporcionar retroalimentación

• permitir un seguimiento del proceso de aprendizaje.

• motivar curiosidad en el alumno.

• permitir que se evalúe el rendimiento.

La calidad de la enseñanza y del aprendizaje, y el valor de los materiales, reside en la capacidad que tengan los autores de estructurar los contenidos, así como de considerar los recursos metodológicos y didácticos más adecuados para los objetivos de aprendizaje previamente establecidos.

Interacción y comunicación

La comunicación y la interacción son los elementos fundamentales concebidos como básicos si se quiere establecer un sistema eficaz y eficiente de enseñanza-aprendizaje e-learning. A este respecto, debemos entender por aprendizaje basado en la interacción y comunicación la actividad en la cual dos o más personas trabajan en forma conjunta para definir un significado, explorar un tema o mejorar sus competencias, según lo expresan Harasim, Hiltz, Turoff, & Tales, citados por Shalk, (2009, p. D12). A esta actividad se le denomina también aprendizaje colaborativo:

in particular, collaborative or group learning refers to instructional methods that encourage students to work together on academic tasks. Collaborative learning is fundamentally different from the traditional "direct-transfer" or "one-way knowledge transmission" model in which the instructor is the only source of knowledge or skills (Harasim, 1990, citado por Starr, 2009)3

Más adelante, el mismo Starr (2010), afirma que el trabajo de estudio colaborativo está más centrado en el aprendizaje que en la enseñanza de un profesor:

“in collaborative learning, instruction is learner-centered rather than teacher-centered and knowledge is viewed as a social construct, facilitated by peer interaction, evaluation and cooperation. Therefore, the role of the teacher changes from transferring knowledge to students (the "sage on the stage") to being a facilitator in the students' construction of their own knowledge (the "guide on the side"). Some examples of collaborative learning activities are seminar-style presentations and discussions, debates, group projects, simulation and role- playing exercises, and collaborative composition of essays, exam questions, stories or research plans (Hiltz and Turoff, 1993). This new conception of learning shifts away the focus from the teacher-student interaction to the role of peer relationships in educational success (Johnson, 1981)”4.

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3 En particular, la colaboración o el aprendizaje en grupo se refiere a los métodos de instrucción por los cuales se alienta a los estudiantes a trabajar juntos en tareas académicas. El aprendizaje colaborativo es fundamentalmente diferente del tradicional de "transferencia directa" o de “una sola vía de transmisión de conocimientos " en el que el instructor es la única fuente de conocimiento o habilidades (traducción del autor).

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4 En el aprendizaje colaborativo, la enseñanza está centrada en el alumno y no centrado en el docente y el conocimiento es visto como un constructo social, facilitado por la interacción entre pares, la evaluación de y la cooperación. Por lo tanto, la función de los cambios de docentes de la transferencia de conocimientos a los estudiantes (el "sabio en el escenario") para ser un facilitador de los estudiantes en la construcción de sus propios conocimientos (el "guía al lado"). Algunos ejemplos de actividades de aprendizaje colaborativo son el Seminario presentaciones estilo y debates, debates, proyectos de grupo, simulaciones y ejercicios de role- playing, y de colaboración la composición de ensayos, preguntas de examen, historias o planes de investigación (Hiltz y Turoff, 1993). Esta nueva concepción de aprendizaje se aparta del enfoque de la interacción profesor-alumno al papel de las relaciones con los compañeros en el éxito de la educación (traducción del autor).

Fuente: Snalk, (2009).

Figura 2

Escala Conners para maestros.

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En la figura 2, elaborada por la profesora Shalk (2009), se evidencia un puente del ejercicio comunicativo que se presenta en la dinamica del aprendizaje e-learning. en ese esquema, la autora le da la razón a Starr diciendo que en la figura se define el “aprender haciendo” (learning by doing), en el cual se requieren las herramientas de aprendizaje que permitan a los participantes la lectura y escritura en la Web, bajo el principio “ensayo- error”; es decir, volvemos a Rodríguez: “o inventamos o erramos”.

En la segunda posición del círculo superior de la Figura 2, nos encontramos con “Aprender Interactuando” (learning by interacting), es decir, intercambiar ideas con los pares, (con el guía de al lado), con otros internautas o, siplemente, con todo el sistema. Recordamos que una de las herramientas más importantes de la internet son los hipervínculos y los hipertextos.

Figura 3

Escala Conners para maestros.

Fuente: Snalk, (2009).

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De esta manera, nos encontramos con un sistema que permite una total interaccion, basado en simples principios de la comunicación espacial (Fig. 3).

Es decir, nos encontramos con una red de interconexiones que, en definitiva, pueden ser manejadas como quien conduce una orquesta, con la diferencia de que aquí una nota discordante no altera el producto del concierto. Aprender buscando, de acuerdo a Schalk (2009) —learning by-searching— es lo que Starr (2010) llama “la construcción de sus propios conocimientos” [del estudiante]; en otras palabras, es el método usado por el estudiante para obtener las fuentes de información requeridas para sus trabajos tales como tareas, ensayos e informes. Esto, en definitiva, enriquece el campo cognitivo de quien efectúa la búsqueda.

En este ámbito entra también el comportamiento del estudiante, quien aprende a compartir la información con sus pares y a discutirla. Es sabido que tener información disponible, no significa, necesariamente, aprender y, en este caso, el intercambio de ideas con otros permite, en definitiva, aprender y aprehender la información encontrada en Internet.

Lo importante del proceso de aprendizaje es que los estudiantes y el “guía de al lado” se sientan compenetrados e integrados, lo cual permite construir una férrea comunidad virtual entre los pares y sus profesores. Hay integración e interdependencia entre quienes asumen una responsabilidad individual, la que cada día incrementa su grado de colectivización.

Quienes creen en el mito de que los alumnos de e-learning trabajan solos, están equivocados, pues en este sistema llega a existir más interacción y participación entre los miembros del curso virtual, incluso que el que pudiera generarse o existir en un aula presencial.

En la Universidad de las Artes Ciencia y Comunicación de Chile (UNIACC), por ejemplo, hay resultados muy exitosos en el ámbito de graduados de pre-grado (licenciaturas on-line), postgrado (Magíster on-line) y, últimamente, también en el ámbito de los postgrados, al finalizar 2009, con el egreso del primer grupo del Programa de Doctorado en Comunicación, dentro del cual por lo menos ha concluido el desarrollo de la malla curricular un grupo de ocho alumnos, quienes, previo su respectivo examen de suficiencia investigativa, serán candidatos a Doctor.

Corolario

Mefistófeles en Fausto (Goethe, 1998) dice sarcásticamente a los viejos que retozaban sin hacer nada ni interesarse por nada: “¿Señores ancianos, qué hacéis en ese rincón?”.

De esa manera podríamos también preguntar a aquellos “ancianos” del pensamiento que aún no creen en los cambios revolucionarios que puede significar la enseñanza por el sistema e-learning: ¿qué hacéis en esa forma que no aceptáis los cambios, y dais la espalda a la innovación? Tratan de mitificar el modelo, pero este ya ha demostrado que funciona, que enseña, que capacita. Es de esperar que el Ministerio de Educación de Chile, comience, de una vez por todas, a tener una política adecuada sobre el tema, pues se está corriendo el peligro de que profesionales de alto nivel emigren a otras latitudes por falta de oportunidades laborales en el país.

Referencias

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Goethe, J. (1998). Fausto. Madrid: Editorial Alba.

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Marcelo, C., Puente, D., Ballesteros, M. y Palazón, A. (2000). E-learning-Teleformación. Diseño y Desarrollo de la Formación a través de Internet. Barcelona: Tecnos.

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