Desigualdad Estructural en el Acceso a las Tecnologías:
Análisis Desde las Zonas Rurales de Ecuador
Daniel Yoffre Valdivieso Solórzano
Universidad San Gregorio de Portoviejo. Portoviejo-Ecuador
La educación rural en Latinoamérica padece de falencias desde los estados: insuficiente infraestructura, docencia
inadecuada, escasa implementación tecnológica y políticas educativas poco contextualizadas. Muchos estudiantes
terminan la educación media sin competencias básicas como la lectura o la escritura, debido a la baja calidad de la
enseñanza que reciben. Este ensayo tiene como propósito evidenciar las acciones limitadas y desarticuladas del sistema
educativo ecuatoriano, especialmente en zonas rurales dispersas, frente a la incorporación de tecnologías en los
procesos pedagógicos. El estudio se desarrolló desde un enfoque cualitativo, con una perspectiva crítica y
transformadora, basada en la metodología de investigación-acción participativa. A través del análisis documental y del
estudio del caso del sitio centenario Bijahual, se examinan las condiciones educativas reales, proponiendo estrategias
adaptadas al contexto local para mejorar la inclusión, la equidad y el acceso a herramientas tecnológicas como la
inteligencia artificial en la educación rural. En conclusión, invertir en educación tecnológica, contextualizada y ética
en la franja rural no solo transforma la aprehensión del conocimiento, sino que también constituye un motor para la
equidad, la inclusión y el desarrollo sostenible de la sociedad.
Palabras clave: desigualdad, educación rural, inclusión, tecnología
Structural Inequality in Access to Technology: Analysis From Rural Areas of Ecuador
Rural education in Latin America suffers from shortcomings stemming from government policies: insufficient
infrastructure, inadequate teaching, limited technological implementation, and poorly contextualized educational
policies. Many students finish secondary education without basic skills such as reading and writing due to the low
quality of instruction they receive. This essay aims to highlight the limited and disjointed actions of the Ecuadorian
education system, especially in dispersed rural areas, regarding the integration of technology into pedagogical
processes. The study was developed using a qualitative approach, with a critical and transformative perspective, based
on participatory action research methodology. Through document analysis and a case study of the Bijahual Centennial
Site, the actual educational conditions are examined, proposing strategies adapted to the local context to improve
inclusion, equity, and access to technological tools such as artificial intelligence in rural education. In conclusion,
investing in technological, contextualized, and ethical education in rural areas not only transforms the acquisition of
knowledge, but also serves as an engine for equity, inclusion, and sustainable development in society.
Keywords: inequality, rural education, inclusion, technology
Notas de autor
Daniel Yoffre Valdivieso Solórzano https://orcid.org/0000-0002-5419-001X email: mmchm1960@gmail.com
El autor declara no tener conflictos de intereses relacionados con la elaboración del presente trabajo.
Fecha de recibido: 24-08-2025 Fecha de Aceptado: 16-10-2025
DOI: https://doi.org/10.5281/zenodo.17925988
e-ISSN 2731-2429 – Depósito legal ZU2021000152
Vol. 32(2) julio – diciembre 2025
https://produccioncientificaluz.org/index.php/encuentro
Introducción
El acceso a las nuevas tecnologías en el campo educacional, en Ecuador, es deficiente, es
decir, no existe una sólida conectividad con internet, reflejando una inadecuada formación en
laboratorios de informática y los estudiantes en un 35% no disponen de dispositivos móviles
(Dirección Zonal 4 de educación; Distrito 13D01, 2018), ocasionando que en estos tiempos
postpandemia se imposibilite en gran medida la formación con la aplicación en modalidad e-
learning, m-learning, generando un deterioro en la aprehensión del conocimiento.
De acuerdo con Parra (2020) “La apreciación casi general de los estudiantes fue de
insatisfacción con los contenidos, en razón al formato predominantemente escrito de los módulos
y la carencia de elementos didácticos que propiciaran una mejor comprensión de los temas” (p.
99). Si en estos casos la comprensión de las actividades en la modalidad virtual tiene ciertas
complejidades en la percepción en sistemas educativos urbanos, se debe dar una observación
exhaustiva al sector rural donde la conectividad es deficiente al momento que los alumnos reciben
los módulos en su teléfonos móviles que no son de gama alta, ellos, tienen debilidad en el
conocimiento de la Inteligencia Artificial (IA) y las facilidades que prestan estas aplicaciones para
la interacción con estos nuevos esquemas que son planteados sin una tutoría previa que facilite la
manipulación de estas herramientas.
Este ensayo tiene como propósito evidenciar las acciones limitadas y desarticuladas del
sistema educativo ecuatoriano, especialmente en zonas rurales dispersas, frente a la incorporación
de tecnologías en los procesos pedagógicos.
Desarrollo
Latinoamérica es el continente más desigual porque expresa los mayores contrastes entre las
élites, que han disfrutado de las ventajas de la modernización, y la mayoría de la población, que ha
vivido en condiciones precarias y vulnerables tal como lo menciona el autor Hopenhayn (2005)
sobre un estudio elaborado en 1998 por las Naciones Unidas sobre “la concentración de la riqueza
en el mundo señalaba que la fortuna sumada de las 225 familias más adineradas del planeta
financiera, como la Argentina, duplicó su índice de pobreza entre 1997 y 2001” (p. 47).
Según menciona Chachagua (2020) “…se trata de una desigualdad duradera, no de un
fenómeno coyuntural” (p. 135). A partir de esta definición es posible adentrarnos en Ecuador,
donde el distanciamiento social permitió la promulgación y aplicación de escenarios de educación
con la modalidad en línea y virtual sin verificar los medios de conectividad y acceso estudiantil
para la comprensión de esta realidad modificada en tiempo récord. Considerar lo expresado en la
educación para el desarrollo por Santamaría et al., (2019) donde expone que “su finalidad es crear
una ciudadanía global que esté comprometida con los Derechos Humanos y que intente trasformar
el mundo para convertirlo en un lugar más equitativo, justo y solidario” (p. 179).
Bijahual es un sitio centenario, jurisdicción geográfica de Abdón Calderón parroquia rural
del cantón Portoviejo-Manabí-Ecuador; en una extensión lineal de seis kilómetros y con una
población dedicada en alto porcentaje a la agricultura, con predominancia identitaria montuvia.
Existe en su intermedio (3 km.) un sistema de unidad educativa completa (Inicial hasta tercero de
bachillerato) con una población de 350 estudiantes. Cada día se convocan en las plataformas
digitales los profesores para diseñar cómo pueden acceder a la comunicación con los educandos.
Se ha registrado números telefónicos de los padres para auscultar el acceso al internet y enviar los
planes y programas en formato m-learning sin que se los haya tutelado en el reconocimiento de
estas herramientas tecnológicas.
Tampoco se ha, socializado los instrumentos pedagógicos y, los profesores parecen
maratonistas para dar inicio a este ciclo escolar que ya tiene retrasos en el tiempo y en la
planificación de las actividades. La Figura 1 representa todo un acto de exclusión hacia los
educandos; por una parte, la infraestructura precaria en la zona rural, y por otra, los niños, de pie,
soportando los largos discursos de los directivos que llegan de vez en cuando a las escuelas
dispersas de la ruralidad.
Figura 1
Escolaridad rural en Portoviejo
Nota: Salón de clases en la zona rural de Portoviejo año 1970. Fotografía proporcionada
por el Cronista de Portoviejo Ramiro Molina Cedeño (2025)
Otros aspectos que vale reseñar son las designaciones de directivos en los sistemas de
educación inicial y bachillerato, en muchos casos, cuotas políticas o amarres, ejecutivos que
carecen de objetivos y metas, que están mermados en el la utilización de matrices y comunicación
digital. Todo esto apunta a una formación mediocre en la población que accede a la educación.
¿Dónde nos encontramos?
Para Garibay (2019) “Romper el paradigma de lo difuso en la adopción tecnológica implica
la disertación profunda, de carácter curricular que demanda el sector educativo; una apuesta
tripartita de: estrategia, tecnología y gestión” (p. 243). Es decir, que mientras no se corrijan los
detalles en las políticas de educación que se generan desde el estado, cuando se inobserve que el
contexto social en cada región y localidad del país es distinto, que es necesario realizar estudios
regionales en educación para comprender los aspectos sociales y anímicos con que estudiantes y
profesores lidian los procesos educativos no presenciales, las diferencias en el tiempo serán
notorias en el ejercicio profesional de los educandos.
Es importante preguntarse, como lo plantea De Agüero (2020) “¿Cómo es que el desarrollo
de las tic y las tac pasa a ser un invento generalizado que en la pandemia se convierte en una
coyuntura social para el cambio cultural en las instituciones de educación superior?” (p. 3).
Coligiendo que solo para salir al paso se crean estos procesos virtuales, que es el profesor el
conejillo para aplicar y obtener resultados que con seguridad serán moldeados o ajustados por los
tecnócratas para difundirlos luego como ejemplos de superación e iniciativas modelo.
En afinidad de criterios con Trujillo y Cardona (2019) quien reseña que “la formación
pedagógica que reciben los futuros docentes, y la que recibieron los profesores en ejercicio, es
insuficiente para los retos particulares que impone la educación rural, lo cual va en concordancia
con una visión de Estado centrada en la ciudad y con el distanciamiento entre este y el campo,
producto de los procesos de industrialización y burocratización modernos, de los que la escuela no
es ajena” (p. 184).
Nuevos Liderazgos de Educación
El ejercicio y aplicación de nuevos retos en la educación global debe situarse en contextos
específicos como la zona rural y la evangelización tecnológica tal como lo menciona Mora (2021)
en su texto “la evangelización en las redes sociales es una realidad y al mismo tiempo, un desafío
para las Iglesia del siglo XXI. Las redes sociales virtuales han sustituido en muchos aspectos, a los
foros y espacios tradicionales de evangelización” (p. 47).
Para Marchena y Solano (2019) las nociones “sin embargo han sido cambiantes, la
heterogeneidad en el aula es real, ya que no se puede encontrar a un grupo de estudiantes en una
mismo aula de clase con las mismas capacidades y problemas a nivel cognitivo o psicomotor” (p.
14) y es contraproducente suponer que la educación puede mantenerse al margen de estas
transformaciones; el sistema educativo debe ajustarse a las exigencias emergentes de aprendizaje
que están surgiendo en las generaciones más recientes.
Una vez que hemos logrado un recorrido por las diversas circunstancias de estos recursos
pedagógicos aunados a una incipiente relación con las nuevas tecnologías y en donde no se
establece el punto de partida y se pretende llegar; habrá que persuadir a los profesores que
desempeñan su rol en las zonas de educación dispersa, ya que es fundamental que los individuos
sean capaces de identificar las circunstancias que los rodean con el propósito de modificarlas de
manera consciente y reflexiva, atendiendo a las particularidades de su entorno. En este proceso,
resulta esencial diseñar respuestas basadas en la inferencia y en la determinación adecuada de los
recursos, métodos, técnicas y acciones necesarias para alcanzar los objetivos propuestos.
Asimismo, se debe efectuar un análisis riguroso que permita detectar errores o desviaciones,
promoviendo así la mejora continua. La comunicación de la información debe realizarse de forma
selectiva y estratégica, garantizando su pertinencia y utilidad en cada contexto. Finalmente, es
importante reconocer que no promover la transformación sustentada en la ciencia equivale a
intentar ser escuchado en medio del bullicio de una contienda sin propósito, lo que resalta la
relevancia del conocimiento científico como motor del cambio y la innovación.
Inteligencia Artificial (IA)
Las contribuciones de la IA inciden de forma favorable en la enseñanza de los estudiantes,
dado que respeta sus ritmos, tiempos, espacios y cultura. No obstante, antes es necesario inducir y
adiestrar a los profesores y alumnos de la franja rural especialmente en el uso de nuevas prácticas
de educación.
Tal como lo proponen López y Portocarrero (2019) “La población rural es parte de un país
con sistemas, normas, leyes e instrumentos de aplicación para resolver los problemas generales
como la pobreza, desnutrición, entre otros; además busca desarrollarse como país en un mundo
globalizante” (p. 103). Lo que se anula cuando desde el estado se restringe la entrega de estos
servicios a los beneficiarios sin limitaciones o segregaciones. La caricatura que sucede más abajo,
despierta otra percepción de la infraestructura y exclusión, si bien el trabajo colaborativo de padres
y madres de familia en la ruralidad puede verse como esquemas solidarios, el traslado en
amontonamientos en cajones de vehículos con hijos en escolaridad, nos demuestra la poca
importancia de los actores del desarrollo del país en temas de equidad.
Para abarcar las dinámicas de posicionamiento de instrumentos pedagógicos en la modalidad
E-Learning y M-Learning en los estudiantes de zonas dispersas, es preciso entender las diferentes
eficiencias que posibiliten la obtención de herramientas y recursos tecno- bibliográficos, redes,
nodos entre otros, para complementar su comprensión. En el ámbito de la pedagogía virtual, esta
investigación destaca la relevancia de la persuasión y de las facilidades que ofrecen las nuevas
tecnologías para el reconocimiento y la apropiación del conocimiento en el contexto educativo.
Igualmente, se subraya la importancia de contar con recursos cuantitativos y cualitativos, como
medios digitales, sitios web, vínculos, enlaces y diversos soportes tecnológicos, que favorezcan
una mejor aprehensión del aprendizaje, apoyados en una adecuada conectividad, una planificación
cronológica coherente y el cumplimiento de normas de trabajo establecidas.
Se propone una estrategia de persuasión que facilite la exploración inicial del conocimiento,
el refuerzo guiado por el formador, el encuentro sincrónico para el intercambio de ideas, así como
nuevas exploraciones y los ajustes necesarios en el proceso formativo. Esta dinámica requiere de
personas capacitadas para transmitir la información de manera efectiva a los estudiantes,
apoyándose en diversas herramientas tecnológicas y sistemas de búsqueda accesibles desde
dispositivos como teléfonos celulares, tabletas, computadoras portátiles y de escritorio.
Comenzaremos por hacer notorio en ellos que el aprendizaje lo usamos decenas de veces al
día. En una búsqueda en la red porque el software de Aprendizaje Automático ha aprendido a
indexar las páginas. El uso de Facebook y otras aplicaciones, todo es aprendizaje automático.
De modo que coincidimos con los cientistas de la IA Ubilla et al. (2020) “Con sus
capacidades avanzadas de procesamiento de lenguaje natural y aprendizaje automático,
proporciona búsqueda bibliográfica, resumen de documentos, generación de citas y respuesta a
preguntas” (p. 7). De forma inconsciente, utilizamos motores de búsqueda como Google o Bing,
que se apoyan en complejos algoritmos para localizar, clasificar y presentar la información
disponible en la red. Entre estos algoritmos se encuentran los de rastreo (crawling), encargados de
explorar e indexar las páginas web; los de indexación, que organizan la información recopilada
para facilitar su acceso; y los de ranking, como el conocido PageRank, que determinan la relevancia
de los resultados mostrados según diversos criterios de calidad y pertinencia. Gracias a la
interacción entre estos procesos, los usuarios pueden obtener respuestas rápidas y precisas a sus
consultas en Internet.
Para Navarrete et al. (2025), la IA es “la capacidad de las máquinas para imitar procesos de
pensamiento humano, tales como la resolución de problemas, el reconocimiento de patrones y la
toma de decisiones”. Aplicado al contexto de la IA “se enfoca en que los sistemas puedan aprender
de la experiencia y mejorar su rendimiento sin intervención humana directa”. De modo que,
Inteligencia Artificial y Aprendizaje automático conduzcan a “optimizar procesos clave en
educación superior, como la creación de rutas personalizadas de aprendizaje, la automatización de
evaluaciones, el análisis predictivo del rendimiento y la gestión eficiente de recursos académicos”
(p. 2).
Es fundamental mantener una comprensión actualizada sobre las acciones y alcances de la
IA, en un contexto marcado por el crecimiento exponencial de la web y los procesos de
automatización. Este panorama ha generado una disponibilidad de datos sin precedentes,
posibilitada por el uso de modelos de lenguaje avanzado como Grok, ChatGPT, Gemini o
DeepSeek, los cuales están transformando las formas tradicionales de acceso a la información y
sustituyendo progresivamente la dependencia de los sitios web convencionales.
El aprendizaje automático, entendido como el campo de estudio que otorga a las
computadoras la capacidad de aprender sin ser programadas explícitamente, representa una
oportunidad significativa para abordar diversos problemas educativos. Su aplicación permite
personalizar los procesos de enseñanza y aprendizaje, identificar patrones en el rendimiento
estudiantil y optimizar estrategias pedagógicas basadas en datos, contribuyendo así a una
educación más equitativa y eficiente.
Enseñar algoritmos de aprendizaje implica brindar a los estudiantes un conjunto de
herramientas útiles para comprender y aplicar la IA. Sin embargo, tan importante como aprender
a usarlas es reflexionar sobre las implicaciones éticas de su aplicación, especialmente en lo que
respecta al manejo de datos, la equidad y la transparencia. Incluir esta perspectiva permite formar
ciudadanos digitales responsables y conscientes del impacto social de la tecnología.
Propuesta
Los procesos de la sociedad de la información exigen a las instituciones educativas un
urgente cambio en sus tradicionales imposiciones de formación. Los esquemas basados en IA
avanzan hacia una importante mejora en la educación para todos los niveles. Mediante un análisis
cualitativo detallado de los recursos pedagógicos y de los procesos de aprendizaje, se busca
fortalecer la comprensión de los estudiantes en relación con su contexto social y cultural. Esto
permite que los alumnos integren sus saberes ancestrales con los contenidos académicos,
promoviendo una educación significativa que reconozca la relación del ser humano con su
entorno natural y comunitario, y fomente prácticas de aprendizaje que respeten y valoren la
dialogicidad con la tierra y la comunidad.
El desafío de las instituciones educativas radica en planificar, diseñar, desarrollar e
implementar competencias digitales a fin de formar mejores profesionales y humanistas en
posibilidad de comprender y coadyuvar al progreso de su entorno tecnológico en función a sus
necesidades, a la vez de aproximarse al uso de una comunicación global de un lenguaje digital
apoyado en programas desarrollados de IA. El objetivo es devolver el conocimiento para resolver
problemas o necesidades de la sociedad educativa que carece de facilitadores anclados en la IA.
Se debe tener en consideración no sólo la ejecución material-operacional de la propuesta o diseño,
sino también el contexto social, cultural, geográfico, participativo, institucional, entre otros.
El siguiente paso de la investigación tecnológica es cómo se va a ejecutar la
operacionalización del proceso, determinar la metodología que se aplicará en equipos humanos y
el uso de la IA para el aprendizaje individual y colectivo, la pedagogía, y el cronograma de
actividades. El resultado es la aplicación de una invención o mejora de un diseño, lo cual debe
estar ratificado por una recolección y análisis de datos revisados en el andamiaje del proyecto o
diseño.
Es de importancia, luego de mostrar los indicadores de baja intervención en las zonas pobres
y dispersas de Ecuador, que se promuevan políticas públicas eficientes, eficaces, equitativas y de
largo alcance. En áreas como la salud y la educación básica, una forma óptima de lograr una
mayor equidad puede ser mediante enfoques que se basen en los derechos como lo menciona el
Banco Mundial (2004) “En este sentido, en el informe se examinarán pruebas empíricas para
saber si la consecución explícita de derechos económicos y sociales es realmente eficaz para
lograr mejoras en el bienestar de los grupos más pobres en estas dimensiones” (p. 23). El banco
mundial señala más precisamente, y en aras de la equidad, el Estado debe ocuparse en forma
prioritaria de brindar educación a aquellos sectores sociales que no pueden adquirirla en el
mercado educativo.
Lo que sería motivo de verificación dada la ausencia de cumplimiento. Más adelante señala
Domenech (2007) “elevar la calidad pedagógica y revitalizar las escuelas públicas para alumnos
pobres al apoyar mejoras en la enseñanza y el aprendizaje” (p. 66). Con estas sugerencias y tras
largos periodos en los que asumen gobiernos que exponen dentro de sus planes de trabajo el
fortalecimiento de la educación, estas propuestas no se cumplen, quedando solo como actos orales
demagógicos. Basándose en las críticas al proyecto inacabado de la modernidad y a sus ideales,
se equipará equivocadamente la igualdad con la homogeneidad en otro apartado, Domenech
(2007) menciona que “cuando en realidad la igualdad se sustenta en la idea de universalidad, así
como la equidad en la particularidad” (p. 75).
El estado no esperó que se presentaran cambios sustanciales con estos problemas de salud
global y ahora tienen que mostrar su desnudez cuando en la intervención de nuevas tecnologías
aplicadas a la educación, el sector rural tiene grandes problemas en la conectividad. En otros
instrumentos del banco mundial puede encontrarse esta naturalización y encubrimiento de las
desigualdades sociales mediadas por la diversidad cultural, expresados con una terminología ajena
al lenguaje estándar del organismo: los indígenas son diferentes en tanto grupo porque comparten
una historia de represión colonial y son vistos como diferentes por estructuras de poder externas
Ahora nos quieren denominar ciudadanos de la aldea global, es posible que consideren que cuando
un ciudadano de la diversidad étnica tiene un celular o un computador ya conoce todo lo que
reflejan los continentes.
La Figura 2 se muestra el desarrollo de infraestructura de investigación urbana; en la
ruralidad, es imposible y en tiempos actuales que se acerque o promueva la presencia de estas
bibliotecas a los estudiantes de la franja rural.
Figura 2
Bibliotecas físicas
Nota. Biblioteca de consulta estudiantil en Universidad San Gregorio de Portoviejo, Ecuador (2025)
La dinámica consiste en motivar a toda la comunidad (incluyendo Juntas Parroquiales,
líderes y lideresas comunitarios, docentes, estudiantes, familias y circuitos educativos) para que
los laboratorios de computación disponibles en el sector se conviertan en espacios de
implementación de IA. Más allá de la mera digitalización de textos pedagógicos, la IA puede
facilitar la creación de recursos educativos interactivos, la personalización del aprendizaje y el
análisis de la información educativa, potenciando así la aprehensión del conocimiento y
optimizando los procesos de enseñanza y aprendizaje en la comunidad.
Al hacerlo, la información se convierte en fuente de interés de alumnos y comunidad en las
que haciendo uso de estos equipos que estaban solo al alcance de directores y profesores se
promueva el interés de la comunidad estudiantil. En primer lugar, por la curiosidad de aprender de
la manipulación de textos físicos y la forma de convertir en textos digitales. Otro considerando es
la organización de los contenidos que se digitalizarán, es aquí donde la información se procesa y
se queda en el intelecto de la comunidad. Finalmente, el uso de aplicaciones de asistencia
inteligente permite en la comunidad dispersa o rural la evangelización de la tecnología la misma
que los posicionará en la búsqueda de otras estrategias de la IA.
Figura 3
Aplicaciones de tecnología
Nota. Uso de computadores para digitalizar textos escolares con la aplicación de la IA en la
formación pedagógica de los educandos en la franja rural. Fotografía obturada en una casa rural
(2025).
La Figura 3 expone la ausencia importante de la tecnología (Internet) con equipos que, si
bien están en alguna familia rural, estos, no son considerados en las unidades educativas (escuelas,
colegios de la ruralidad), a pesar de anuncios del estado de acometer con conectividad e
implementar de laboratorios tecnológicos para acortar la brecha de desigualdad existente.
La organización para posibilitar esta interacción entre instituciones, comunidad, estudiantes
y la web, requiere de capacidades múltiples y deseo de superación. Las IE (Instituciones
educativas) proveerá de los textos para la implementación de la biblioteca digito virtual y la
asistencia de facilitadores para orientar a los involucrados en el uso y aprendizaje de la tecnología,
los Gobiernos Autónomos (Parroquial, Cantonal, Provincial) facilitarán la implementación de PC
en las comunidades donde se procesará la digitalización de los contenidos.
El resultado se verá al final del periodo académico cuando se deba realizar un nuevo
diagnóstico cuanti-cualitativo de este diseño aplicado desde la objetividad que dispone la IA para
el desarrollo cognitivo de los pueblos ancestrales y su amigabilidad de la tecnología para el acarreo
de nuevos aprendizajes.
Figura 4
Integración
Nota. Integración de trabajo colaborativo en la construcción del conocimiento. Fotografía
tomada del internet (2025).
La Figura 4 es explicita en la integración de saberes, si se acorta la brecha educativa en la
ruralidad insertando nuevas tecnologías para los estudiantes por parte del estado; si se promueve
políticas públicas de educación en igualdad de condiciones (Urbano-Rural), la condición humana
se acrecentará en los procesos de enseñanza y aprendizaje y mejorará el equilibrio entre igualdad
e inclusión. Las actividades tanto intelectuales como experimentales son fundamentales para
comprender los procesos de investigación y para transformar el conocimiento, ya que permiten
analizar críticamente la información existente y generar nuevas ideas a partir de la práctica y la
experimentación.
Conclusiones
Es difícil obtener resultados efectivos cuando se trabaja a distancia con estas aplicaciones en
zonas dispersas de las ciudades en desarrollo. En el sector educativo, esto ha afectado los procesos
de visualización y acceso a la información tecnológica. Por ello, es necesario diseñar y establecer
nuevos modelos educativos. Trascender conjuntamente en la relación entre educación, docentes,
estudiantes y sociedad requiere orientarse por directrices éticas. En este sentido, la educación
tecnológica constituye no solo una promesa para impulsar la causa educativa, sino también un
instrumento para generar efectos significativos en el aprendizaje y en la transformación social.
La característica de la educación tecnológica es explorar, sistematizar, intuir, asimilar y
utilizar el concepto de tecnología y los nuevos modelos de educación para cambiar en enseñanza
y capacitación, en beneficio del estudiante y de su generación y entorno sociocultural para el
desempeño imparcial. La consolidación de técnicas eficientes y adecuadas donde se posibilite la
presencia de profesores o formadores en lingüística, historia de los pueblos, etnógrafos, entre otros,
para que la educación de estos nuevos tiempos logre la asociatividad de las sapiencias ancestrales,
la educación moderna y los nuevos desafíos del conocimiento.
Analizar la equidad y oportunidades para el rendimiento académico que se otorga desde las
políticas de estado en la educación rural, permitirá avizorar el alcance y mejora de la calidad de la
educación en estos espacios aislados donde el coeficiente intelectual es importante por los
conectores de la ancestralidad en relación al conocimiento enséñale a pescar y comerá todos los
días. cita de Lao-Tse, filósofo y escritor chino. No podremos continuar delatando cifras de niños
que no saben leer; por tanto, es crucial el papel de la formación en educación como fundamentos
del desarrollo de los pueblos y su economía.
La idea central es que la educación debe entenderse como una inversión, no como un gasto.
Invertir en educación genera conocimientos, habilidades y capacidades en las personas, lo que
impulsa la productividad y la innovación. A su vez, este crecimiento educativo y económico se
traduce en el progreso de la sociedad, mejorando la calidad de vida, fortaleciendo las instituciones
y promoviendo el desarrollo sostenible. Cuando un país destina recursos financieros a la educación,
está invirtiendo directamente en su propio crecimiento y en el bienestar de su población.
Por tanto, si la educación rinde frutos es el momento de reconocer la importancia del
conocimiento y aprendizaje desde su mayor potencial, el capital humano rural. Estamos en tiempos
de nuevas inteligencias donde esta, se sustenta o compite entre la tecnología y la educación, la
capacidad generadora humana se ve atrapada por el desempeño deficiente de los sistemas de
educación en países en desarrollo. Los avances inminentes tecnológicos y la competencia global
requieren de conocimientos y habilidades que la educación debe promover ahora mismo.
Es tiempo de invertir en los jóvenes de la franja rural, quienes, por su condición de herederos
del conocimiento ancestral, poseen un gran potencial para resolver problemas, mejorar sus
habilidades de aprendizaje y comunicación, y adaptarse a nuevos entornos e identidades. Dotarlos
de la herramienta más valiosa que puede ofrecer el Estado, la educación, les permitirá reducir la
pobreza y la desigualdad, convirtiéndose en agentes clave del desarrollo integral de sus
comunidades.
El presente estudio resulta relevante porque visibiliza las brechas educativas y tecnológicas
en zonas rurales, subrayando la importancia de la inteligencia artificial y de los recursos digitales
para optimizar los procesos de enseñanza y aprendizaje. No obstante, se reconocen algunas
limitaciones, entre ellas la focalización en un territorio específico, la necesidad de mayor
seguimiento longitudinal y la variabilidad en la conectividad y el acceso a dispositivos tecnológicos
entre los estudiantes.
En términos de investigación futura, resulta pertinente explorar la integración de
metodologías híbridas que combinen saberes ancestrales y tecnologías emergentes, evaluar el
impacto de programas de alfabetización digital en comunidades rurales y analizar cómo la IA puede
personalizar y mejorar la experiencia educativa en contextos con limitaciones de recursos. Además,
se abre la posibilidad de investigar estrategias que fortalezcan la formación docente para la
enseñanza mediada por tecnología y su capacidad de guiar a los estudiantes en entornos digitales
de manera ética y responsable.
En síntesis, invertir en educación tecnológica, contextualizada y ética en la franja rural no
solo transforma la aprehensión del conocimiento, sino que también constituye un motor para la
equidad, la inclusión y el desarrollo sostenible de la sociedad. La educación, apoyada por la
inteligencia artificial y guiada por principios éticos, se consolida, así como la herramienta más
poderosa para empoderar a los jóvenes rurales y construir comunidades resilientes y autónomas
frente a los desafíos del siglo XXI.
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